Con una “rara” enfermedad

23 junio 2013
Noticias de Yucatán ()

Daniel Jesús Carrillo Polanco (*)

Amnesia política
Como bien dijo uno de los ponentes en un diplomado sobre gobiernos municipales: “Los políticos cuando son candidatos prometen de todo y cuando llegan al cargo de inmediato sufren de una enfermedad ‘rara’, porque extrañamente dejan de escuchar y de ver”.
Pero parece que ese padecimiento es aún más grave en algunos ya que no sólo no escuchan ni ven, lo que no les conviene, claro está, sino que además sufren de amnesia. No pretendo hacer de este espacio una guerra de dimes y diretes, pero sí creo justo hacer precisiones basadas en hechos concretos que sólo un amnésico, real o político, podría negar.
En una carta que envió al Diario la señora Araujo dice que cumplió como diputada federal. Me gustaría, por respeto a los lectores, hacer algunas precisiones históricas sobre este asunto.
La señora Araujo debería recordar el primer “spot” publicitario, que está en Youtube, en el que dirigió el siguiente mensaje a los meridanos: “Quiero ser diputada por Mérida. Como arquitecta he aprendido que la mejor manera de hacer las cosas es escuchando a la gente. Mérida se merece representantes que cumplan su palabra, que regresen, que den la cara, personas que sean honestas, responsables y congruentes. Soy angélica Araujo y quiero ser tu diputada”.
Será que la hoy senadora no recuerde que desde un principio rompió un compromiso que hizo de manera pública. Fue su primera contradicción al mensaje de que “la gente merece representantes que cumplan su palabra, que sean responsables y congruentes”.
Cuando ya estaba postulada como candidata a diputada federal, Sociedad en Movimiento le formuló varias preguntas, entre ellas la siguiente:
“¿Piensa usted cumplir el término completo del mandato para el cual está pidiendo el voto ciudadano?”. La respuesta de la arquitecta Araujo, firmada por ella, fue: “Desde el momento mismo que uno decide asumir el compromiso de participar en una contienda electoral y luego de resultar electa mediante el voto ciudadano van de por medio también la intención y obligación personal de cumplir en tiempo y forma la encomienda obtenida. En lo personal tengo la plena intención de atender el período marcado por nuestra Carta Magna”.
¿Y que pasó? Que faltando a su compromiso de cumplir lo que marca la Constitución, como ella misma señaló, firmó y publicó, la señora Araujo sólo duró tres meses en la Cámara Baja. ¿Es cierto o es falso? Ahora sí que papelito habla.
En su misiva la señora senadora asegura que cumplió porque presentó tres iniciativas de las cuales, como ella misma admite, sólo una fue dictaminada. ¿Y las demás promesas? ¿Se le olvidaron? Le recordamos algunas:
1. Rendición de cuentas. 2. Castigar la violencia contra la mujer. 3. Vivienda digna para jóvenes y personas con capacidades diferentes. 4. Gestionar 500 millones de pesos adicionales para Yucatán. 5. Ampliar el programa Oportunidades. 6. Eliminación del IETU y trámites engorrosos, y, 7. Oportunidades de empleo para personas mayores de 40 años. Es obvio que en sólo tres meses que estuvo como diputada federal no iba a cumplir.
Usted amable lector, tiene la palabra. La señora hizo compromisos públicos para ganarse la confianza de los meridanos para llegar a la Cámara Baja: 1. Permanecer en el cargo los tres años. ¿Cumplió? 2. Hacer realidad todas sus propuestas legislativas. ¿Cumplió? 3. Cumplir su palabra y dar la cara. ¿Lo hizo? Ya después tocaremos los otros temas.- Mérida, Yucatán.
dajecapo@hotmail.com
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*) Maestro en comunicación política y marketing electoral y consejero estatal del PAN
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