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Beatriz Hernández es una doctora que murió tras ser detenida por policías municipales de Progreso de Obregón, Hidalgo.
La médica había sido remitida a la galera de la presidencia municipal tras un accidente vial. Sin embargo, la corporación no justificó ante su familia cuál había sido el motivo de su traslado.
De acuerdo con la prensa local, quince minutos antes de su deceso, su padre pudo verla. Ella le pidió que la sacara de ahí porque la habían golpeado.
El hombre intentó conocer los motivos por los cuales estaba detenida, pero no le dieron información.
Cuando volvió a las celdas de retención primaria en la que se encontraba su hija, estaba siendo atendida por personal del área de retención primaria.
Beatriz Hernández fue trasladada al hospital, pero ya no contaba con signos vitales. Ahora las autoridades de Hidalgo aseguran que se suicidó. Sin embargo, hay muchas contradicciones en su versión.
El 9 de junio, alrededor de las 16:40 horas, Beatriz Hernández sufrió un accidente menor en su auto Seat Ibiza en Progreso de Obregón.
Varios testigos señalaron que descendió de su vehículo y se identificó como médico para ayudar a los posibles heridos.
Los involucrados en el percance negaron tener lesiones de consideración y Betty se comprometió a cubrir los daños materiales.
Sin embargo, un testigo señaló que una mujer afectada por el accidente le robó unas pertenencias. El hecho provocó una riña:
“DE UNO DE LOS CARROS AFECTADOS SE BAJÓ UNA SEÑORA Y SE METIÓ AL CARRO DE LA CHICA Y SUSTRAJO UN MONEDERO Y SACÓ LO QUE TENÍA ADENTRO Y SE LO LLEVÓ. EN ESE MOMENTO SE ARMÓ UNA DISCUSIÓN Y LLEGÓ LA POLICÍA, PORQUE LA CHICA SE ACERCÓ A DECIRLE A LA SEÑORA QUE LE REGRESARA SUS COSAS”.
En medio de la situación llegaron los elementos de la Policía, quienes sometieron a Beatriz Hernández con fuerza excesiva:
“LOS PARAMÉDICOS, QUE LLEGARON EN ESE MOMENTO, SOLO ATENDIERON A LA PERSONA DEL OTRO AUTO. PERO SIN DECIR MÁS LA MUJER POLICÍA EMPEZÓ A TRATAR DE SOMETER A LA CHICA. AHÍ COMENZÓ EL JALONEO ENTRE ELLAS Y DOS OFICIALES VARONES”.
Los dichos de los testigos fueron corroborados por el video de la detención de Beatriz Hernández.
Las imágenes fueron captadas por una persona que presenció el incidente y en ella se aprecia a la joven doctora siento obligada a abordar una patrulla.
En el video se muestra a Beatriz Hernández en mal estado. Alrededor de ella hay dos policías y varios testigos.
Una oficial sostiene a la joven y le coloca las manos en el cuello para ingresarla a la patrulla. La doctora dice algo inaudible y la agente le responde:
“NO IMPORTA, YO ESTOY HACIENDO MI TRABAJO”.
Después aparece un individuo, quien menciona que intentó ayudarla. Se acerca a ella para preguntarle un número telefónico.
Sin embargo, la médica no responde y es ingresada a la unidad oficial. En el video se muestra a la policía dándole una patada para suba las piernas.
El video se corta después de algunos segundos. Sin embargo, los testigos afirmaron que, al interior de la patrulla, el rostro de Beatriz Hernández comenzó a sangrar.
Beatriz Hernández estuvo involucrada en un accidente automovilístico. Sin embargo, los agentes de la Policía Municipal no la trasladaron al hospital.
El padre de la doctora, Cirilo Hernández, pudo verla con vida y ella le pidió que la sacara porque la habían golpeado los policías.
Quince minutos después, don Cirilo vio cómo intentaban resucitarla. Además, relató para la periodista Susana Jiménez, de La Silla Rota, que los tenis de su hija estaban tirados. A su parecer, habría forcejeado con alguien.
La joven fue trasladada al hospital, donde el personal nada pudo hacer, pues llegó sin signos vitales.
Familiares de Beatriz Hernández denunciaron públicamente que la doctora murió por brutalidad policiaca.
A través de un comunicado, el ayuntamiento de Progreso de Obregón precisó que Beatriz Hernández conducía intoxicada. Por ello, había provocado una carambola en la que habían resultado afectados cuatro vehículos.
De acuerdo con el documento, el padre de Betty y una tía arribaron a la Dirección de Seguridad Pública. Ahí, don Cirilo Hernández habría discutido con al joven.
Posteriormente, la doctora supuestamente se colgó de la galera con ‘un pedazo de tela’. El comunicado establece que la joven fue trasladada al hospital y todavía presentaba signos vitales.
Sin embargo, señaló que en el nosocomio fue donde ya no presentaba signos vitales.
En un primer mensaje, el Ayuntamiento no había mencionado la supuesta discusión con su padre. Tampoco había hecho referencia a conducta escandalosa por parte de la joven.
Asimismo, acusó que los señalamientos por brutalidad policiaca son parte de un golpeteo político.
La versión de las autoridades contradice a la de las investigaciones. A través de una tarjeta informativa, la Fiscalía de Hidalgo informó que la joven, tal como lo afirmaron sus familiares, llegó sin vida al hospital:
“SE RECIBIÓ NOTIFICACIÓN DE UNA CLÍNICA DE DICHO MUNICIPIO MEDIANTE LA QUE SE CONOCIÓ DEL INGRESO DE UNA PERSONA SIN SIGNOS VITALES QUE MINUTOS ANTES FUE DETENIDA POR LA POLICÍA MUNICIPAL DE PROGRESO DE OBREGÓN E INGRESADA AL ÁREA DE RETENCIÓN PRIMARIA”.
Una fuente de la fiscalía señaló que el cuerpo de Beatriz Hernández se trasladó a Pachuca. Ahí se le practicará una segunda necropsia.
Según se informó, la primera autopsia arrojó huellas dactilares en el cuello. Esto negaría la versión de que la joven usó un trapo o servilleta para suicidarse.
La familia de Beatriz Hernández exigió que se investigue la brutalidad policiaca y uso excesivo de la fuerza. A su parecer, eso le habría provocado la muerte.
Por su parte, Pao Palacios, cuñada de Beatriz, denunció en Facebook que la joven doctora sufrió un intento de abuso:
“VARIOS COMUNICADOS ASEGURAN QUE ELLA SE SUICIDÓ CON UNA SERVILLETA PERO NO ES VERDAD!!! INTENTARON ABUSAR DE ELLA Y LA ESTRANGULARON” [SIC].
¿Quién era Beatriz Hernández Ruiz?
Betty Hernández tenía 29 años y estaba haciendo su residencia en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Pachuca.
La doctora era originaria del municipio de Tezontepec de Aldama y egresada del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Además, su vocación de servicio la llevó a estar en la primera línea de combate contra el COVID-19 en Actopan.
Familiares y amigos de Beatriz Hernández negaron que la joven halla atentado contra su vida:
“BEATRIZ TENÍA MUCHOS DESEOS DE TENER ÉXITO EN LA VIDA, DE SEGUIR SALVANDO VIDAS. ERA UNA NIÑA MUY APEGADA A LOS ESTUDIOS, CON BUENAS CALIFICACIONES Y SIEMPRE CON EL DESEO DE SALIR ADELANTE. ERA TRABAJADORA, RESPONSABLE, LIBRE, HONESTA Y MUY ENTREGADA A SU TRABAJO. A LAS PERSONAS QUE NO TENÍAN RECURSOS ECONÓMICOS LES CONSEGUÍA INCLUSO EL MEDICAMENTO”.
