Una operación sorpresa contra el ambulantaje impidió ayer que numerosos vendedoresinstalaran su mercancía en las calles remodeladas del Centro Histórico.
Ayer publicamos la denuncia de Luis Alberto Gómez Carrillo, bolero desde hace nueve años en el Portal de Granos, ubicado en la calle 56 entre 65 y 67, en contra de los inspectores de la subdirección de Mercados que lo movieron de su sitio para ubicarlo en medio del pasillo.
El lustrador de calzado se quejó de que la acción fue para permitir que un vendedor de bisutería y de diversos artículos ocupara su lugar.
En un recorrido por el sitio se observaron diversas estructuras metálicas sin mercancías, apoyadas en las columnas de los arcos.
Bultos de ropa, calzado y otros artículos se ubicaban a su lado en el suelo, en espera de ser abiertos y exhibidos.
Sin embargo, pese a la vigilancia de los inspectores, alrededor del mediodía varios “puesteros” del Portal de Granos se animaron a extender su mercancía al paso de la gente, principalmente de ropa, calzado y bisutería.
“Pajareros” y vendedores de aguas frescas y dulces también son vendedores comunes de ese lugar, quienes se suman a los propietarios de diversos negocios establecidos que sacan sus mercancías a los pasillos para exhibirlas al paso de la gente.
En un boletín de prensa el Ayuntamiento informó que con motivo del retorno de los paraderos a sus lugares de origen se realizó una inspección de rutina en las calles del Centro Histórico para invitar a los ambulantes a retirarse de las renovadas aceras que son áreas destinadas al uso peatonal.
La información señala que el lunes y ayer una veintena de inspectores de la Subdirección de Mercados mantuvo comunicación directa con quienes realizan el comercio informal en aceras del primer cuadro de la ciudad, para invitarlos a retirar sus puestos con mercancías y cumplir las normas.
El boletín indica que el retorno de los transportes urbanos a los paraderos originales motivó a la Comuna a intensificar la tarea rutinaria mañana y tarde.
En estos dos días los inspectores invitaron a los comerciantes ilegales a cumplir con el reglamento, ya que después procederán, dado el caso, a realizar los decomisos correspondientes.
La Comuna meridana aseguró que como parte del rescate del Centro Histórico las aceras ahora son más amplias para comodidad de los transeúntes, lo cual “llama la atención” de comerciantes informales para instalarse en zonas de ascenso y descenso de los camiones urbanos.
Para recuperar las mercancías decomisadas por desacato a las normas, los ambulantes deberán pagar una multa de entre 2 y 12 salarios mínimos.
El Ayuntamiento asegura que en esta administración no expide ni ha expedido permiso alguno para realizar el comercio en calles como la 55, 64 y 67 del Centro Histórico y que a la fecha no hay denuncia alguna contra algún inspector que pida dinero a cambio de un “derecho de piso”.
Publicada: Miércoles, 25 de julio de 2012 3:06 am |
Mérida
Aunque el Ayuntamiento de Mérida asegura que no haexpedido permisos para el comercio ambulante en calles como la 55, 64 y 67, cada día crece la presencia de comerciantes informales.
Aunque el Ayuntamiento de Mérida asegura que no ha expedido permisos para el comercio ambulante en calles como la 55, 64 y 67, cada día crece la presencia de comerciantes informales.
La Comuna dice también que no hay denuncias contra algún inspector que pidadinero por “derecho de piso”, aunque surgió una queja contra inspectores de la subdirección de Mercados que movieron de su sitio a un bolero para ceder su lugar a un ambulante.
En la imagen, comercios instalados a un costado de ese portal, quienes sí tienen permiso.
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