Como parte de un especial sobre la igualdad de género, ‘As Equals’, CNN publicó la historia de Madina Karimy, una niña de 13 años originaria de Afganistán que debido a las costumbres patriarcales de su cultura viste de niño pues su familia no ha sido “bendecida” con un varón.
Madina vivió durante dos años con identidad femenina y después sus padres, Khoda y Amena Karimy, decidieron comenzar a vestirlo como un niño.
De acuerdo con la tradición afgana “bacha posh”, los padres pueden cambiar el género de sus hijas para atraer la suerte y así poder concebir por fin al niño deseado, ya que una familia sin un hijo varón es considerada incompleta.
Sodaba Ehrari, editora jefe de la Agencia de Noticias de Mujeres de Afganistán explicó a CNN que las niñas crecen con un sentimiento de culpa, al sentir que son una carga para sus progenitores. Así lo dijo: “Las mujeres no pueden ganar dinero para mantener a sus familias, no pueden vivir solas, y hay muchas razones que llevan a esta sociedad patriarcal a practicar ‘bacha posh’”.
Madina pasó a ser Mangal y, al igual que sus dos hermanas mayores que también viven como varones, ayuda a su padre con el arado de la tierra, a su madre con las compras y atendiendo a los invitados cuando llegan a casa.
Los padres de Mangal se sienten orgullosos y complacidos de lo útil que resulta para ellos el tener a un ‘bacha posh’ en casa.
“Hice a mi hija como un chico para que me sirviera comida y agua cuando trabajaba en el desierto”, expresó Khoda Karimy al medio citado.
La transformación de niña a niño solo es temporal ya que llegada la pubertad las chicas deben renunciar a sus costumbres y tareas varoniles para comenzar a vivir de nuevo como mujeres, algo que genera confusión e impacto.
Como niño, los ‘bacha posh’ pueden disfrutar también de actividades que las niñas no pueden realizar como montar bicicleta, jugar en la calle, volar cometas, cosas a las que renuncian llegada la preadolescencia.
Nadia Hashimi, una pediatra afgano-estadounidense, explica que este cambio de roles genera en las niñas una crisis de identidad y en el peor de los casos una disforia de género, situación en la que los pequeños no están cómodos con su género biológico.
Para la especialista la costumbre “bacha posh” debe extinguirse para que la sociedad afgana pueda vivir en igualdad de género
Telemundo