Durante una rueda de prensa que dio la Organización Mundial de la Salud (OMS), el director de ese ente, Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó la importancia de que los países hagan un esfuerzo mancomunado para hacerle frente a las amenazas sanitarias que enfrenta el planeta.
Para empezar, hizo referencia a la importancia de seguir impulsando la vacunación contra la covid-19, pues además de que mitiga los riesgos de morir o requerir una hospitalización después de contagiarse, sostuvo que hay evidencia científica que muestra que podría generar protección frente a algunas secuelas de la enfermedad.
Alingo Likaka Manasse, enfermera jefe del Centro de Salud de Yalanga, examina las lesiones en las manos de Lituka Wenda Dety, de 41 años, que sufre de viruela del mono, en Yakusu, Tshopo, República Democrática del Congo, el 2 de octubre de 2022.
Colombia está entre los cinco países más afectados por la viruela del mono, según la OMS
E hizo referencia a un estudio científico que fue publicado recientemente y analizó los efectos que tienen las vacunas en la protección de la salud de los pacientes.
“Además de reducir drásticamente las posibilidades de enfermedad grave y muerte, la investigación refuerza que la vacunación y el refuerzo también reducen la probabilidad de que los pacientes con covid-19 sufran un ataque cardíaco o un derrame cerebral”, declaró el doctor Tedros.
Y señaló que hizo énfasis en esos estudios porque muestran razones sólidas que deben motivar a distintos gobiernos del mundo a seguir vacunando a sus poblaciones. Esto es importante sobre todo en el caso de los adultos mayores que tienen más vulnerabilidades frente a la covid-19.
“También es fundamental que los gobiernos mantengan y refuercen la vigilancia y la secuenciación para que, a medida que el virus evolucione, las vacunas, las terapias y los diagnósticos puedan evaluarse y actualizarse rápidamente según sea necesario”, anotó el máximo jefe del ente multilateral.
Según señaló, el Grupo Asesor Técnico de la OMS para la Composición de la Vacuna covid-19 ya ha subrayado la importancia de que haya una vigilancia continua de las mutaciones del nuevo coronavirus, porque se convierte en la hoja de ruta de los desarrolladores de vacunas.
En esa medida, también sostuvo que el mundo se encuentra en una posición mucho mejor en comparación a la que tenía hace tres años. En 2020 la incertidumbre reinaba y lo cierto es que no había certeza sobre las posibilidades de que la humanidad fuera capaz de desarrollar una vacuna. Por ello, el doctor Tedros pidió que no se subestime la situación de salud pública actual.
Esto, además, pasa por mostrar voluntad política y destinar recursos públicos suficientes para financiar los proyectos de investigación y prevención para desmontar la amenaza. Vale decir que en la actualidad la covid-19 sigue siendo una emergencia de salud pública de preocupación internacional, lo cual quiere decir que necesita de una respuesta coordinada de las autoridades de distintos países.
Preocupación por terremotos y conflictos
Además de virus como el de la viruela del mono o el que produce la covid-19, la OMS también sigue de cerca la situación sanitaria crítica que han provocado otras coyunturas durante los últimos meses, como los terremotos que se han producido en Turquía y Siria y la invasión de Rusia a Ucrania.
“En la Conferencia de Seguridad de Munich el viernes pasado, dije que en este momento, el mundo sigue sin estar preparado para otra pandemia”, indicó el doctor Tedros. “Si bien los líderes tienen muchas otras crisis con las que lidiar, la atención sobre futuras amenazas de epidemias y pandemias debe permanecer o pagaremos un alto precio”, sostuvo.
Así mismo, subrayó que se presentaron nuevos terremotos en Turquía que volvieron a poner en alerta a la población y si bien no tuvieron la misma intensidad que los registrados a principios de mes, causaron cientos de muertes.
Miembros de una familia se mantienen calientes junto a una fogata mientras siguen a un equipo de rescate que busca a sus familiares entre un edificio destruido en Antakya, en el sur de Turquía. - Foto: AP
Señaló que tanto en Siria como en Turquía la cifra de muertes por estos desastres naturales ascienden a más de 47.000. Así mismo, señaló que se han documentado más de 125.000 personas heridas.
“Con 26 millones de personas afectadas por el terremoto, la OMS lanzó un llamamiento urgente por US$ 84,5 millones para apoyar los esfuerzos de respuesta sanitaria inmediata en ambos países”, concluyó el doctor Tedros.