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El comerciante portaba un arma de fuego y se defendió; al final también perdió la vida.
Un enfrentamiento a balazos entre delincuentes y un vendedor de agua purificada, el cual se resistió a un asalto en la colonia Primero de Mayo, dejó como saldo dos personas muertas ayer por la tarde; una de las víctimas es el propio repartidor y la otra uno de los delincuentes.
El comerciante y ahora extinto, quien fue identificado como Alfredo Cornelio Muñoz, de 50 años de edad, conducía una camioneta Nissan tipo Estacas de color blanco, con placas de circulación VM-43672, se había detenido frente a una conocida pozolería en la avenida Paseo de la Sierra, de la colonia Primero de Mayo, para suministrar garrafones con agua.
De acuerdo a la versión de varios testigos, fueron al menos tres los delincuentes que lo interceptaron con la intención de despojarlo del poco efectivo de las ventas del día, sin embargo, el comerciante aprovechó un descuido de los ladrones y sacó de entre su ropa un revólver, con el cual enfrentó a los asaltantes.
Un tiroteo se desató en plena avenida, cuando uno de los criminales abrió fuego en contra de su víctima, quien a su vez repelió la agresión cuando los delincuentes escapaban sobre la calle Moisés Sosa, logrando herir a uno de ellos quien cayó al suelo, mientras que Alfredo Cornelio también se desvanecía sobre la calle al resultar herido de bala en el pecho.
Los curiosos del lugar de inmediato dieron aviso a los cuerpos de primeros auxilios, así como a las autoridades preventivas; estas últimas acordonando el área de los hechos, donde los paramédicos de la Cruz Roja confirmaron el deceso del vendedor de agua y del presunto delincuente.
Peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron un barrido en la zona, encontrando sobre la avenida varios casquillos percutidos, así como un arma de fuego tipo revólver calibre 38 aún en manos del repartidor de agua, con el cual se defendió durante el enfrentamiento.
Finalmente, los cadáveres fueron levantados de la escena del crimen, para ser llevados hasta el anfiteatro de la FGE, donde aún el presunto delincuente permanecía en calidad de desconocido, mientras que el cuerpo del comerciante fue reclamado por familiares. Tabasco Hoy.
El comerciante portaba un arma de fuego y se defendió; al final también perdió la vida.
Un enfrentamiento a balazos entre delincuentes y un vendedor de agua purificada, el cual se resistió a un asalto en la colonia Primero de Mayo, dejó como saldo dos personas muertas ayer por la tarde; una de las víctimas es el propio repartidor y la otra uno de los delincuentes.
El comerciante y ahora extinto, quien fue identificado como Alfredo Cornelio Muñoz, de 50 años de edad, conducía una camioneta Nissan tipo Estacas de color blanco, con placas de circulación VM-43672, se había detenido frente a una conocida pozolería en la avenida Paseo de la Sierra, de la colonia Primero de Mayo, para suministrar garrafones con agua.
De acuerdo a la versión de varios testigos, fueron al menos tres los delincuentes que lo interceptaron con la intención de despojarlo del poco efectivo de las ventas del día, sin embargo, el comerciante aprovechó un descuido de los ladrones y sacó de entre su ropa un revólver, con el cual enfrentó a los asaltantes.
Un tiroteo se desató en plena avenida, cuando uno de los criminales abrió fuego en contra de su víctima, quien a su vez repelió la agresión cuando los delincuentes escapaban sobre la calle Moisés Sosa, logrando herir a uno de ellos quien cayó al suelo, mientras que Alfredo Cornelio también se desvanecía sobre la calle al resultar herido de bala en el pecho.
Los curiosos del lugar de inmediato dieron aviso a los cuerpos de primeros auxilios, así como a las autoridades preventivas; estas últimas acordonando el área de los hechos, donde los paramédicos de la Cruz Roja confirmaron el deceso del vendedor de agua y del presunto delincuente.
Peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron un barrido en la zona, encontrando sobre la avenida varios casquillos percutidos, así como un arma de fuego tipo revólver calibre 38 aún en manos del repartidor de agua, con el cual se defendió durante el enfrentamiento.
Finalmente, los cadáveres fueron levantados de la escena del crimen, para ser llevados hasta el anfiteatro de la FGE, donde aún el presunto delincuente permanecía en calidad de desconocido, mientras que el cuerpo del comerciante fue reclamado por familiares. Tabasco Hoy.