- En los últimos cinco años, la diabetes mellitus ha sido la causa de muerte de más de 7 mil yucatecos y a nivel Península la cifra supera los 20 mil.
Expertos reunidos en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) concluyeron que es necesario el trabajo conjunto de autoridades, academia y profesionales del área para combatir este problema de salud pública, que en la entidad registra 5 mil casos nuevos por año.
Señalaron que entre los principales determinantes sociales de la diabetes en la entidad se encuentran la falta de educación en salud y nutrición, el sedentarismo, no ejercitarse por la excesiva carga laboral, así como la falta de conciencia e incluso la indiferencia hacia el padecimiento crónico.
Al respecto se realizó la mesa panel "La diabetes en perspectiva: la formación, la atención, la sociedad y el paciente", en el marco de la Semana de la Nutrición 2020.
En esta charla, Edsi Gómez Pérez, jefa del Departamento de Nutrición del DIF Mérida, señaló que la economía también es un determinante del padecimiento debido a que se ha comprobado un mayor consumo de azúcares y grasas en personas que perciben menores ingresos.
Por su parte, Leticia Mena Macossay, directora Desarrollo Comunitario y Alimentación del DIF Yucatán, mencionó que la falta de insumos y nuevas tecnologías es otro factor que dificulta el tratamiento de la diabetes.
“Muchas personas todavía no tienen acceso a las nuevas tecnologías para el manejo de la diabetes porque los dispositivos son muy costosos. El no tenerlos dificulta el manejo de la enfermedad además de que hace más doloroso el proceso por los piquetes que reciben todos los días”, aseveró.
Por ejemplo, continuó, una persona con diabetes mellitus tipo 2, se debe checar 2 o 3 veces al día y quien vive con la tipo 1, requiere de seis chequeos y de dos o tres inyecciones por día.
“La falta de la tecnología hace que la toma de decisiones esté limitada en cuanto a información. La tecnología hace más amigable el proceso y se tiene información más precisa. Actualmente no es un lujo y permite una vida más plena para el paciente”, destacó la directora general de la Asociación Mexicana de Diabetes en el Sureste.
Añadió que en el tratamiento del padecimiento es importante la funcionalidad familiar, que incluye el tipo de alimentos que se adquieren para el hogar, cuántos y dónde trabajan los integrantes de la familia y cómo utilizan su tiempo libre.
Por su parte, la licenciada en Nutrición y Educadora en Diabetes, Diana Novelo Alzina, al hablar de las personas con diabetes tipo 1 mencionó que todavía existen estigmas hacia ellas.
“Es necesario dar a conocer que la diabetes tipo 1 es una enfermedad autoinmune en la que el sistema de defensas ataca a células beta productoras de insulina en el páncreas. Al no producir insulina, esta se provee a través de inyecciones”, acotó.
Para saber qué cantidad de insulina se necesita, continuó, hay que checarse con un glucómetro y se requieren lancetas para picar el dedo, tiras reactivas, dos tipos de insulina y jeringas. Esto representa al mes un gasto de entre 4 mil 400 y 5 mil 400 al mes.
“Si le agregamos dispositivos tecnológicos como los sensores de glucosa, el gasto se eleve hasta los 6 mil 200 pesos por mes. Si se usa una bomba de infusión de insulina puede alcanzar los 12 mil pesos mensuales”, finalizó.
Sipse