EE.UU.- Los ataques
racistas en Estados Unidos son cada vez más constantes y en algunos casos
los mismos policías han participado en homicidios, tal como sucedió con George
Floyd, Breonna Taylor, Tony Robinson, Dontre Hamilton, Ernest Lacy y Sylville
Smith. Este domingo, Jacob Blake, un hombre afroamericano recibió
varios disparos por policías a plena luz del día.
El gobernador del
estado de Wisconsin, Tony Evers, dio a conocer que tanto él, como su
esposa Kathy, apoyaron a la familia, amigos y vecinos del hombre, luego de que
policías de Kenosha, Wisconsin le dispararon siete veces, cuando se
disponía a subir a su auto.
De acuerdo con
informes de la policía local, los agentes fueron llamados por un “disturbio
doméstico” pero se desconocen los detalles. Algunos aseguran que tenía
una orden de arresto actual por abuso doméstico y agresión sexual, y
al desobedecer las órdenes de los policías fue baleado.
Hasta el momento
medios han informado que Blake se encuentra hospitalizado debatiéndose
entre la vida y la muerte. También en el video se puede apreciar como dos
policías armados caminan detrás de él y una vez que abre la puerta de su
camioneta, uno de los oficiales lo sostiene de su playera y posteriormente le
dispara.
En la escena,
aparecen varias personas quienes presuntamente son sus familiares y
el abogado Ben Crump confirmó en su cuenta de twitter que en el vehículo se encontraban
los tres hijos de la víctima:
“Confirmado: los 3
HIJOS de Jacob Blake estaban EN EL COCHE en el que se estaba metiendo cuando
@KenoshaPolice le disparó esta noche. Vieron a un policía dispararle a su
padre. Estarán traumatizados para siempre. No podemos permitir que los
oficiales violen su deber de PROTEGERNOS. ¡Nuestros niños se merecen algo
mejor! #JusticeForJacobBlake”, tuiteó.
Luego de este
ataque, cientos de personas marcharon hacia las instalaciones de la policía,
durante el domingo por la noche y durante su paso incendiaron varios vehículos
mientras gritaban: “No nos marcharemos”.
Debido al caos que
generó el caso de Jacob Blake, autoridades emitieron declaratoria de toque
de queda de emergencia y al ver que muchas personas no lo respetaron,
comenzaron a dispersar gases lacrimógenos para hacer que se retiren del lugar.