- Luego de que en este medio de comunicación se difundiera el caso en que una mujer solicitó el apoyo de una patrulla porque su ex pareja Gabriel Contreras Rivero, envió a un empleado a colocar una cadena con candado en un acceso a su domicilio, un presunto familiar de este señor ha solicitado a través de mensajes que sea retirada esta información ya que es errónea.
Ante dicha solicitud se solicitaron pruebas para poder comprobar que lo denunciado por la señora es falso, sin embargo, lo único que proporcionó esta persona desde un perfil de Facebook a nombre de Eduardo, fue una versión escrita de los hechos, en defensa del agresor y donde se intenta desacreditar a la mujer por su presunto estado de ebriedad, lo cual, no prueba nada.
Hay que resaltar que la misma versión de los hechos inicialmente proporcionada por un hombre, después apareció en redes sociales, en los comentarios de perfiles de otros medios de comunicación que postearon el caso, lo extraño de esto, es que el perfil (Rosy Padilla), del cual se hace este comentario, es falso, ya que es de reciente creación y esta es su única interacción.
Otra de las pruebas que presentó esta persona, es la grabación de una llamada telefónica que sostiene con el supuesto hijo mayor de la señora, donde asegura que el menor confirma que su madre estaba alcoholizada, drogada y agresiva cuando pidió la patrulla, lo cual, al escuchar la grabación nunca es mencionado.
Cabe mencionar que la versión proporcionada por esta persona, dice que el supuesto estado de ebriedad de la señora fue verificado por el policía Juan Carlos Guape Gómez, mismo que llegó a bordo de la patrulla que había solicitado la señora; sin embargo, llegó a atender a la ex pareja (Gabriel Contreras Rivero), quien se encontraba en las esquina del domicilio de la señora.
Hay que resaltar que en el momento que sucedieron las acciones mencionadas, la señora realizó transmisiones en vivo a través de sus redes sociales, denunciando la desatención por parte de la policía y el estado de ebriedad que se le adjudica no se percibe en ningún momento.