Después de que hace un par de semanas se violara la
privacidad del actor Gabriel Soto con la difusión de un video íntimo, esa misma
imagen se transformó en una piñata para despedir el 2020.
El negocio familiar “Piñatería Ramírez” creó la pieza en la
que se observa a un hombre parecido a Soto, desnudo y con un letrero en el que
se lee “Happy new year. Disfrútenlo 2021”.
Sin embargo, aunque Dalton Javier Ramírez, encargado de la
piñatería, dice a EL UNIVERSAL que la pieza fue bien recibida por el público
también podría costarles una demanda de parte del actor pues ya se han puesto
en contacto con ellos.
“Recibimos una llamada y luego nos contactaron por mensaje y
nosotros vamos a checar si se puede (que nos demanden), vamos a hablar con
alguien que nos asesore para saber si podemos vender la pieza porque la gente
la quiere”, explica en entrevista.
“Primero dijeron que no eran gente de Gabriel Soto y nos
empezaron a explicar el tema de los derechos de autor, que es una marca
registrada… Me explicaron todo eso y nunca dijeron que eran de Gabriel Soto,
nada más la última dijo que era como un comunicado para que yo estuviera al
tanto”, comenta.
De acuerdo con Dalton después de hablar con su familia será
este lunes que se reúnan con un abogado para que les expliquen si puede o no
proceder una demanda, además entre los planes está el cambiar el nombre de la
piñata para evitar conflictos.
El comerciante comenta que únicamente realizaron una piñata
de Soto para ser exhibida pero no se vendió, de haberlo hecho detalla que ese
tipo de trabajos están entre los 800 y 1200 pesos.
“Me imagino que va a llegar la demanda pero ahorita como se
atravesaron las fiestas no hemos tenido abierto el local de la piñatería
entonces no nos hemos dado cuenta si han ido a buscarnos”, detalla.
“Me han dicho que no me pueden demandar, hemos platicado (en
familia) que hay que asesorarnos con alguien. Mañana vamos a tener una junta
con alguien que sabe de lo legal para que nos asesore de qué podemos hacer
porque nunca nos había pasado”.
El único conflicto que han tenido por una de sus creaciones
fue por una piñata de Karla Panini, con la que Dalton relata que recibieron
amenazas telefónicas.
En el caso de la de Gabriel Soto, Dalton comenta que aunque
no se ha vendido, la gente la recibió bien y estuvo yendo al local a tomarse
fotos con él.
“Ahora que se dice que me va a demandar la gente está un poco enojada porque dice que es una piñata. No he visto muy malos comentarios solamente en contra de él sobre por qué va a demandar”.
Fuente: El Universal