Al menos 14 personas murieron y cinco desaparecieron después de que varios deslaves provocados por las fuertes lluvias que están azotando Brasil en los últimos días hayan arrasado con al menos siete domicilios de varios municipios del estado de Río de Janeiro.
Siete de las muertes, de la misma familia, han sido víctimas de un deslizamiento de tierra en el municipio de Paraty, 250 kilómetros al oeste de Río de Janeiro. Seis personas han muerto por el mismo motivo en Angra dos Reis, 156 kilómetros al oeste de Río. La última persona falleció en Mesquita, en la región metropolitana, según ha informado ‘O Globo’.
Según la Defensa Civil, en Angra dos Reis, en las últimas 48 horas ha llovido el equivalente a 655 milímetros en tierra firme y 592 milímetros en la isla de Ilha Grande, lo que se trata de las lluvias más fuerte jamás registradas en Angra dos Reis y sus alrededores.
Defensa Civil pidió además a la población que permanezca en sus casas y solo salgan cuando sea recomendado y ha establecido un sistema de alerta de sirenas para avisar de la necesidad de evacuar a los refugios
También se informó de árboles caídos bloqueando carreteras y la ciudad de Nueva Iguazú está en estado de alerta ante posibles crecidas tras registrar 166 milímetros de lluvia en apenas 4 horas, lo que supone un 175 de la media de lluvia para el mes de abril.
La previsión apunta a una continuidad de la inestabilidad meteorológica con lluvia en todas las regiones del estado de Río de Janeiro, según Bomberos, que realizó más de 600 salidas desde la tarde del viernes.
La Costa Verde, donde se encuentran estos municipios afectados, está en la costa sur de Río, cerca de la frontera con Sao Paulo, y se trata de una región muy montañosa y muy cerca del mar, lo que provoca deslizamientos de tierra cerca de la playa. (Reuters)
