Para que la lluvia no cayera sobre su cuerpo y los reporteros que llegaran a la zona no capturaran imágenes, el cadáver del adolescente que murió ayer en colonia Loma de Puerta Grande fue cubierto con un paraguas y una manta.
El menor de edad se vio involucrado en una riña justo en el cruce de la avenida Centenario y la calle Ángel Reyes. Los gritos pasaron a convertirse en golpes.
La discusión no terminó hasta que el hombre con el que discutía el niño sacó un cuchillo y le dio una estocada, la cual ocasionó que el menor de edad se desangrara sobre la intersección de estas calles.
De inmediato las autoridades fueron alertadas sobre lo ocurrido. La movilización de los policías fue lo suficientemente rápida como para poder detener al atacante.
El joven discutió con su agresor antes de morir
Los paramédicos que llegaron a la zona no pudieron hacer nada por el adolescente, quien quedó tirado sobre la carpeta asfáltica, mientras los curiosos se acercaban al lugar para verlo perder el pulso.
Minutos después llegaron los peritos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, quienes llevaron los restos del joven al anfiteatro de la alcaldía.
Ahí será sometido a una necropsia, la cual arrojará la evidencia necesaria para determinar las causas de la muerte del menor. Esta información será anexada a la carpeta de investigación sobre el caso.
Tras estos procesos, la familia del niño podrá reclamar su cuerpo para realizar las ceremonias correspondientes. El agresor fue puesto a disposición del Ministerio Público, el cual se encargará de determinar su situación jurídica.