Ante la advertencia de que el INE enfrenta el conflicto más grande que haya registrado, el Consejo General dio marcha atrás a la propuesta con la que hoy se buscaba facultar a la consejera presidenta, Guadalupe Taddei, para designar de manera definitiva a las personas titulares de diversas áreas ante la falta de nombramiento en la Secretaría Ejecutiva.
“INE, listo para las más complejas elecciones”
En la sesión de este viernes se enlistaron dos proyectos opuestos entre sí para dar salida a la falta de siete titulares de áreas claves que se ha extendido por más de medio año, ante la falta de consensos entre consejeros respecto a las propuestas que ha presentado Taddei Zavala.
Además de la propuesta presentada por el consejero Jorge Montaño, que permitiría a la presidenta nombrar titulares sin someterlo a consideración del resto del Consejo, se presentó otro proyecto a cargo de Claudia Zavala, Martín Faz y Jaime Rivera para establecer un mecanismo extraordinario para volver a discutir los nombramientos faltantes.
Al iniciar la sesión, el consejero Uuc-kib Espadas suplicó a sus compañeros retirar ambas propuestas del orden del día por considerar que ambas serían “devastadoras para el orden constitucional del INE”, que rompían el diseño democrático y que representaban “la elevación del conflicto mayor y público que vivimos el día de hoy, en medio del proceso electoral más grande de la historia en México.
“Los acuerdos que hoy se ponen en la mesa son la condena a que nuestra incapacidad política se eleve a la decisión que tomaría un tribunal (TEPJF) que malamente ha podido administrar sus propios conflictos, como lo evidencian la sistemática inconclusión de sus periodos presidenciales. No debemos dar ese paso, no debemos entrar a la confrontación”, exclamó.
El consejero Jorge Montaño dijo entender la preocupación de Espadas y, en atención a su llamado, pidió retirar el proyecto.
Jaime Rivera intervino en favor de su propuesta sobre el mecanismo extraordinario para nombrar a los titulares faltantes, pero dijo que esta situación derivaba de un hecho en el que lo “excepcional y provisional” se ha convertido en una práctica habitual, en referencia a que la presidenta ha recurrido a la figura de encargados de despacho para colocar personas al frente de las áreas acéfalas en el INE, sin consultar al Consejo General como lo marcan los lineamientos.
“En este caso de las encargadurías, la consejera presidenta ha utilizado un exceso de esa previsión legal, que es reglamentaria, con exceso por lo menos en el tiempo. Si ya llevamos medio año en una situación como esta, el carácter provisional es, por lo menos, dudoso”, exclamó.
Para él, dijo, el proyecto de facultar a la presidencia del Consejo para que nombre a quien desee por encima del Consejo es contrario a la ley y por lo tanto “inaceptable”, mientras que la presentada junto a Zavala y Faz buscaba poner reglas para superar esta situación irregular.
Dania Ravel se pronunció en el mismo sentido, pues acusó que la propuesta de Montaño tenía como fin evadir el consenso para nombrar a la Secretaría Ejecutiva, del cual se debe comprobar que no sólo cuenta con los conocimientos electorales, sino también del manejo interno del INE.
“Hemos tenido también algunas experiencias no gratas en donde se ha puesto a consideración de las de los consejeros electorales personas para ocupar la titularidad de alguna área y, cuando se dice que no existe el consenso, al día siguiente amanecen como encargados de despacho a través de un oficio. Es evidente que lo que se estaba buscando era evadir la construcción de estos consensos”, acusó.
Al final, la consejera presidenta agradeció a Jorge Montaño el retiro de la propuesta que generó controversia, pero también se pronunció en contra de la presentada por Jaime Rivera y los otros consejeros, pues aseguró que era una “invitación flagrante a romper el orden constitucional”.
“Este Consejo no tiene atribuciones para ir normando y regulando asuntos más allá de lo que están regulados, salvo aquellos casos que sean para omisiones de carácter legislativo y en este momento no estamos en esa situación. Reconozco lo que cada uno ha establecido, no lo comparto, por supuesto porque el 31 es un llamado a romper justamente la legalidad que nos ocupa”, dijo.
La Razón.