México.- Autoridades de Jalisco han identificado un nuevo método utilizado por el crimen organizado para la desaparición de restos humanos, tras investigaciones en el Rancho Izaguirre, un predio en el municipio de Teuchitlán utilizado como crematorio clandestino.
El pasado 5 de marzo, integrantes del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, en compañía de la Guardia Nacional, acudieron al predio tras recibir una denuncia anónima. En el lugar, la Vicefiscalía en Personas Desaparecidas localizó múltiples indicios de actividad criminal, entre ellos:
Cinco lotes de restos óseos fragmentados.
400 prendas de vestir, incluyendo calzado y mochilas.
96 casquillos de distintos calibres.
Tres cargadores de armas de fuego.
Tres libros y una libreta.
Una identificación personal.
Las investigaciones revelaron que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) empleaba un método inédito para ocultar los restos calcinados: los enterraban bajo bloques de ladrillo y una capa de tierra, lo que dificultaba su detección en inspecciones previas.
Cabe destacar que en septiembre de 2024, el rancho ya había sido intervenido por las autoridades, lo que resultó en la detención de diez personas, la liberación de dos más y el hallazgo de un civil sin vida. Además, se registró un enfrentamiento entre fuerzas de seguridad y sujetos armados, algunos de los cuales lograron escapar.
A pesar de haber sido asegurado tras la primera intervención, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco encontró que los sellos del predio estaban rotos. Por esta razón, la Fiscalía estatal anunció que revisará la intervención anterior para determinar si hubo omisiones en los procedimientos realizados durante la pasada administración.
Las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer los hechos y dar con los responsables.
