Los policías encargados de cuidar el edificio en Brasil se dieron a la tarea de investigar lo qué ocurría y grabaron todo lo sucedido. ¡Oh, sorpresa! Una puerta se azotaba en repetidas ocasiones mientras las luces del pasillo parpadeaban, tal y como ocurre en las películas de terror.
Una vez que los guardias se acercaron a la zona mencionada, de manera sorpresiva todo quedó en oscuridad, lo que provocó su desconcierto y se encontraron con que no había nada extraño, únicamente dos llaves (gas o agua). Entonces, ¿quién azotaba la puerta o cómo sucedió?
