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En Colima 127 personas privadas de su libertad, recluidas en el Centro de Reintegración Social del estado, diseñaron y confeccionaron 500 pares de sandalias y huaraches que donaron a las personas damnificadas por el sismo del pasado 19 de septiembre.
En Colima 127 personas privadas de su libertad, recluidas en el Centro de Reintegración Social del estado, diseñaron y confeccionaron 500 pares de sandalias y huaraches que donaron a las personas damnificadas por el sismo del pasado 19 de septiembre.
Las autoridades del centro penitenciario de Colima dijeron sentirse orgullosas por la iniciativa de los internos, quienes enviarán calzado para niños, hombres y mujeres a través del centro de acopio operado por el gobierno del estado.
Lo que ustedes han hecho, le demuestra a la sociedad que piden disculpa, con una manera tan altruista como esta, de lo que alguna vez pudieran haber hecho” dijo Abel Saucedo, director de Reintegración Social del Estado de Colima.
Al dirigirse a los hombres privados de su libertad, Abel Saucedo destacó que su iniciativa debe reconocerse, porque su donación está por arriba de muchas personas y empresarios de la entidad “que ni si quiera se han atrevido a dar un peso en beneficio de aquellos damnificados”.
Por su parte y de forma espontánea al hacer entrega del calzado, Francisco Valdovinos, hombre privado de su libertad en el Centro de Reintegración del Estado de Colima, dijo que el trabajo puesto en cada una de las prendas es para apoyar a los habitantes de zonas afectadas, “donde sirva esto, nosotros de todo corazón lo estamos entregando, gracias a las autoridades que nos permitieron realizar este donativo”.
Cuestionado el por qué decidieron realizar esta labor, Valdovinos añadió: “todos y cada uno de los mexicanos traemos algo aquí adentro, que no nos permite dejar solo a quien cayó en tragedia. Nosotros tenemos la posibilidad y lo ayudamos. Para nosotros en realidad los mexicanos nos distinguimos en todo el mundo por eso”.
Con Información de Excelsior