La ex modelo guanajuatense que se refugió en Yucatán, Alicia
L.C., fue vinculada a proceso por el juez de control Luis Armando Mendoza
Casanova, por el delito de violencia familiar, por lo que por los próximos seis
meses seguirá utilizando un brazalete electrónico en uno de sus tobillos.
Alicia llegó al Centro de Justicia Oral de Mérida (Cejom),
vistiendo un pantalón de mezclilla para disimular el dispositivo electrónico
que se le puso para evitar que evada la acción de la justicia.
Cabe mencionar que el grado de cautela en este hecho que se
le imputa es considerado alto, pues hay pruebas psicológicas practicadas a los
menores agraviados que indican que sufrían de maltrato físico y psíquico por
parte de su madre.
El juez no varió las medidas cautelares que le impuso en la
audiencia de imputación, quedando éstas por seis meses más, las cuales fueron
firmar cada mes; no salir del Estado; no acercarse a los menores y al
denunciante, y portar un dispositivo electrónico en el tobillo.
Vale indicar que la ex modelo ha señalado que no cuenta con
recursos suficientes, por lo que su abogado es un defensor público, pero es
sabido que cuenta con guardaespaldas y un hombre, de avanzada edad, que la
acompañan a las audiencias, pues está respaldada por un alto funcionario
policiaco.
Los hechos que ahora se le imputan fueron denunciados por el
empresario gasolinero de Peto, Daniel O. E. C., con el que procreó un niño y
reconoció a una menor como su hija.
La mujer insultaba, maltrataba física y psicológicamente a
los menores, además de que los obligaba a hacer cosas no propias de su edad y
los encerraba en su casa sin comida.
Esta mujer, el 4 de febrero de 1999, cuando contaba con 15
años de edad, en la ciudad de Irapuato, presuntamente mató a su novio Ezequiel
David Fainsod San Miguel, al atarlo a una cama, acuchillarlo y prenderle fuego
estando vivo.
Alicia huyó con su familia a Guadalajara, el Distrito
Federal y Veracruz.
En 2003 llegó a Campeche y en 2006 a Yucatán, donde trabajó
en una gasolinera de Peto y como modelo de pasarelas, anuncios para televisión
y de una tienda departamental.
Fuente: Yucatán a la mano