En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se perdió el rumbo por privilegiar las finanzas por encima de la salud de los derechohabientes. Ahora hay que cambiar el rumbo y recuperar el tiempo; hay un rezago de 3 millones de consultas de especialidad y 10 mil cirugías. Para ello, en 2020 el organismo invertirá más de 16 mil millones de pesos en la contratación de personal médico, de enfermería y en la construcción de infraestructura.
A partir del próximo año aumentará 44 por ciento el número de plazas de médicos residentes, con lo que en marzo próximo ingresarán 7 mil 814 nuevos estudiantes de alguna especialidad clínica, señaló el director del instituto, Zoé Robledo.
El funcionario compareció ayer ante las comisiones de Salud y Seguridad Social del Senado, donde en cuatro horas expuso las carencias en los servicios y contestó exhaustivamente las preguntas que le plantearon los legisladores.
La Jornada