Al menos cuatro niños murieron y otros dos resultaron
heridos, todos de la misma familia, al detonarse un artefacto explosivo que había
sido colocado por los rebeldes chiíes hutíes en la ciudad portuaria de Al
Hudeida, en el oeste del Yemen, informó la televisión estatal.
La explosión ocurrió anoche en el distrito de Hais, al
sur de Al Hudeida, mientras los seis niños jugaban en ese pueblo, según la
fuente. Añadió que ese artefacto explosivo fue colocado por los hutíes
cuando controlaban esa área antes de que fuera capturada el año pasado por las
fuerzas gubernamentales leales al Gobierno de Abdo Rabu Mansur Hadi, reconocido
internacionalmente.
Las recientes lluvias e inundaciones en el Yemen ha dejado
expuestos muchos de esos artefactos explosivos que han sido colocados en
terrenos en las áreas aledañas a las ciudades.
Yemen es escenario de la peor crisis humanitaria a nivel
mundial, después de que el conflicto se intensificara en 2015 entre los
rebeldes hutíes y las fuerzas leales a Hadi, apoyadas por una coalición
liderada por Arabia Saudí.
Los niños se han convertido en las principales víctimas de
esta guerra, que comenzó a finales de 2014 y se intensificó en marzo de 2015
con la intervención de la coalición.
Según la ONG yemení "Mwatana for Human
Rights", tan solo en 2018 un total de 1.117 niños fueron reclutados
con fines militares en la guerra del Yemen. Además, como alertó Unicef el
mes pasado, dos millones de niños no han comenzado la escuela en el país este
año y casi cuatro millones más están en riesgo de dejar la educación.