MÉRIDA.- Locatarios de los
mercados “Lucas
de Gálvez” y “San
Benito” se manifestaron esta mañana para pedir a las
autoridades municipales mayores
facilidades para su labor día con día, pues aseguran que
muchos de ellos no
sacan lo necesario para subsistir, ante las medidas tomadas por
la pandemia del
coronavirus.
Como se recordará, en mayo
pasado ambos centros de abasto fueron cerrados al detectarse un fuerte brote de coronavirus.
Permanecerían así por 14 días, pero se amplió un poco más ese plazo debido a la
tormenta “Cristóbal”, y no fue sino hasta el 8 de junio cuando reabrieron, pero
con medidas de prevención.
Entre otras, poco a poco se
fueron incorporando los locatarios, de acuerdo con sus giros, se habilitó
únicamente la entrada de la calle 56 con 65-A en el “Lucas de Gálvez”, e
incluso se pidió a los vendedores de alimentos llevar todo preparado y no
cocinar en el lugar, además de que todo sería “para llevar”, y se determinó
restringir la entrada a personas de la tercera edad y otros grupos vulnerables
a la enfermedad.
Sin embargo, los locatarios
consideran que las medidas se han reflejado en una fuerte reducción en sus ingresos.
Al respecto, Enrique Sánchez
Dzul, representante del Sindicato de Baratilleros manifestó que supuestamente
el cierre de estos mercados es a las 3 de la tarde, pero desde una hora antes
ya los andan “retirando”.
Asimismo, solicitó que se
abran otros accesos y que la autoridad controle la afluencia de visitantes,
pues si bien necesitan incrementar sus ventas, no niegan que hay que tomar
medidas para evitar que se propague aún más el coronavirus.