El Departamento de Estado de Estados Unidos (EU) alertó este martes a través de un comunicado sobre la nueva adquisición de misiles balísticos por parte de Corea del Norte, infiriendo que esta nación sigue enrolada en la carrera armamentística, por lo que amagó con imponer a sanciones a la nación asiática vía su Gobierno y vía la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En su texto, el Departamento de Estado de EU ubicó a “entidades de adquisición clave y las técnicas engañosas utilizadas por el programa de misiles de Corea del Norte”, agregando que la nación liderada por el hermético Kim Jong-un aplica una serie de “continuos esfuerzos por expandir capacidades que representan una amenaza significativa para la estabilidad regional y global”.
En 2017, Corea del Norte realizó pruebas inaugurales de sistemas de misiles balísticos intercontinentales.
Durante 2019, lanzó misiles de prueba, violando una serie de resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Aunque el Departamento de Estado insiste en que Corea del Norte representa una amenaza para la humanidad, el trasfondo es que el Gobierno de Donald Trump no ha logrado que Kim Jong-un se rinda en el campo de la guerra, incluyendo el de la guerra nuclear, convirtiéndose en una barrera para los intereses de EU en la región, y de ahí su insistencia en las sanciones económicas, como las aplica con Irán, Cuba o Venezuela.
EU tiene rival
Un “aviso” conjunto de los departamentos del Tesoro, Comercio y Estado de EU da cuenta de los esfuerzos de Corea del Norte para obtener desde camiones lanzadores de misiles así como metales y materiales útiles para la construcción de misiles, por lo que advierte a vendedores tener cuidado con las sanciones que aplicaría, pues se dijo “comprometido” a dificultar futuras adquisiciones y la economía de aliados norcoreanos.
Mike Pompeo, titular del Departamento de Estado de EU, dijo en días pasados, en contexto de la Convención Nacional Republicana:
“El presidente (Donald Trump) bajó la temperatura con Corea del Norte y, contra todo pronóstico, logró que el liderazgo norcoreano se sentara a la mesa. Sin pruebas nucleares. Sin pruebas de misiles de largo alcance”.
