Uno de los daños colaterales de las múltiples protestas que se han realizado sobre Avenida de la Reforma son las pintas a los monumentos, sobre todo al de Colón, ubicado sobre Reforma esquina con Morelos, que a pesar de las vallas de protección, en múltiples ocasiones fue pintado y maltratado por varios colectivos.
La estatua fue trasladada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia el 10 de octubre, a un un taller oculto por cuestiones de seguridad, pues se busca impedir más daño a la pieza, en donde pretenden mantenerla lo que resta del año, en lo que se resuelve si regresará a su base en Reforma o se le buscará otro lugar.
La razón por la cual se decidió retirar la estatua del navegante y colonizador de América fue para restaurarla y resguardarla de posible vandalización, porque varios colectivos se propusieron acabar con cualquier manifestación de apoyo a la figura que consideran fue un genocida, así como traficante de niñas.
El retiro de esta estatua fue celebrado por diversos grupos como el colectivo “Lo derrumbamos” que ayer fueron a dos puntos de la Ciudad de México, Juárez y Buenavista, con toda la intención de acabar con monumento atribuido al francés Charles Cordier y que se encuentra en el mismo lugar desde 1877.
