En redes sociales la usuaria Isabel A. dio a conocer que la hija de su amiga Carolina, una menor de edad llamada Ana fue atacada por parte de la dueña del restaurante Harlow ubicado en Paseo de Montejo, quien utilizó, según se relata, un trozo de vidrio roto, además de amenazarla de muerte y golpearla hasta romperle la nariz.
En la denuncia se cuenta que Carolina y su hija Ana llegaron a la ciudad de Mérida en donde pretendían llevar una vida tranquila, y es por ello que inauguraron una galería de arte justo al lado del restaurante Harlow sobre la avenida Paseo de Montejo.
El problema que detonó la agresión fue que la acusada, quien es de origen canadiense, colocó mesas de su restaurante justo frente a la galería, por lo cual, las dueñas del lugar le pidieron a la mujer extranjera que retirara sus mesas. Sin embargo, señala la publicación, la propietaria del restaurante entró agrediendo violentamente a Ana.
De acuerdo con la denuncia en redes sociales, la ahora conocida como #LadyHarlow entró a la galería gritando que mataría y enterraría el cuerpo de la menor, mientras la amenazaba con el trozo de vidrio. Ante esta situación, la adolescente quedó en shock sin poder defenderse, pues la extranjera comenzó a golpear con violencia a la joven hasta que le rompió la nariz; incluso en el audio difundido puede escucharse los gritos de auxilio emitidos por Ana.
Usuarios en redes sociales han reaccionado a este hecho repudiando el accionar de la dueña del restaurante Harlow y pidiendo su extradición, mientras que en la publicación original se pide a las autoridades de Yucatán que se haga justicia ante lo acontecido.
Hasta el momento no existe un posicionamiento por parte de las autoridades policiales ni gubernamentales de la ciudad y el estado, además de que se desconoce el estado de salud de la joven Ana, sin embargo en la publicación de facebook se señala que ya se ha levantado una denuncia ante la fiscalía de Yucatán.
Ayer en la tarde personal de Protección Civil acudió el referido restarurante de la extranjera para colocar los seños de clausura.
