Organizaciones y comunidades indígenas migrantes de los
Estados Unidos demandaron al Departamento de Justicia de California investigar
el tiroteo donde fue muerto el indígena zapoteco de San Vicente Coatlán,
Oaxaca, Gerardo Chávez Martínez, por agentes del Departamento de Policía
de la ciudad de Salinas.
A través de una comunicación, la organización binacional
Comunidades Indígenas en Liderazgo (Cielo) expuso que el 16 de
julio pasado, la policía fue llamada a la casa de Gerardo.
La víctima no hablante del inglés y con conocimiento
limitado del español, no entendió las órdenes de salir de su casa y al levantar
los brazos, cuando portaba en sus manos una pistola de juguete, le disparó un
policía.
Gerardo recibió tres balazos y murió a manos del oficial
Mario Reyes, del Departamento de Policía de Salinas, California",
detallaron.
El escrito lamentó que el oaxaqueño no viviera para ver sus
sueños de trabajar para formar una familia y apoyar a sus hermanos para que
sigan yendo a la escuela, y tengan otras oportunidades fuera del campo.
Subrayó que la muerte del indígena zapoteco sucede dentro de
una epidemia nacional más amplia de asesinatos policiales contra hombres
afroamericanos, morenos e indígenas, porque frecuentemente y prematuramente son
capturados por un sistema construido para criminalizarlos a primera vista.
La condena colectiva de organizaciones migrantes consideró
que “las víctimas de la violencia policial a menudo son criminalizadas en las
narrativas oficiales”.
En otro punto exigió al Departamento de Justicia de
California retomar el caso e investigar el tiroteo para determinar la capacidad
organizativa del Departamento de Policía de Salinas para interactuar con
sensibilidad y eficiencia con la población migrante indígena en su área.
El Centro Binacional para el Desarrollo Indígena Oaxaqueño
(CBDIO), la Organización Comunitaria Proyecto Mixteco/Indígena (MICOP), el
Movimiento Cultural de la Unión Indígena (MCUI) y el Frente Indígena de
Organizaciones Binacionales (FIOB), se han comprometido a permanecer vigilantes
para exigir justicia para el indígena zapoteco y todas las víctimas de la
violencia policial.