Los bomberos estaban pendientes de la previsión
climática para el fin de semana en su lucha contra los incendios en California,
que han alcanzado algunos bosques de gigantescas y antiguas secuoyas mientras
tratan de proteger al árbol más grande del mundo.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos emitió
una alerta por condiciones críticas de incendios en
el Parque Nacional de las Secuoyas, en Sierra Nevada, donde el incendio
'Colony' ardía a un kilómetro del Bosque Gigante, que alberga 2
mil secuoyas gigantes.
Los bomberos han protegido la base del 'General Sherman' con
aluminio resistente al fuego, el mismo material empleado en los refugios de
emergencia de los bomberos forestales y para proteger edificios históricos de
madera, informó la vocera del departamento, Rebecca Paterson.
'General Sherman' es el árbol más grande del mundo por su
volumen, con mil 487 metros cúbicos, según el Servicio de Parques Nacionales:
mide 84 metros de alto y tiene una circunferencia de 31 metros en su base.
El incendio 'Colony' es uno de los dos provocados por rayos,
bautizados en conjunto como KNP Complex, que han quemado unos 46 kilómetros
cuadrados de terreno forestal.
Los fuegos obligaron a evacuar el parque esta semana, así
como partes de Three Rivers, una comunidad de alrededor de 2 mil 500 habitantes
ubicada al pie de las colinas, ante la entrada principal del parque.
Los operarios emplearon topadoras para crear un cortafuegos
entre las llamas y la comunidad.
Un clima más fresco y tranquilo, además del humo bajo
matinal que limitaba el oxígeno, ayudaron a limitar la expansión del incendio
en los últimos días, pero el Servicio Meteorológico dijo que, hasta el domingo,
un sistema de bajas presiones dejará vientos fuertes racheados y reducirá la
humedad en la zona.
Las secuoyas gigantes, algunas con miles de años, están
adaptadas al fuego, que puede ayudarles a propagarse al liberar semillas de sus
piñas y crear claros que permiten que los ejemplares más jóvenes crezcan.
Pero la extraordinaria intensidad de los fuegos, alimentados
por el cambio climático, puede devastarlas.
Una sequía histórica y olas de calor ligadas al cambio
climático han hecho que los incendios sean más difíciles de controlar en el
Oeste de Estados Unidos.
Los científicos sostienen, a consecuencia de este fenómeno,
la región es más cálida y seca que hace 30 años y el clima seguirá siendo más
extremo y los fuegos más habituales y destructivos.
Los más de 7 mil incendios registrados en lo que va de año
en California destruyeron o dañaron más de 3 mil viviendas y otros edificios y
arrasaron más de 7 mil 770 kilómetros cuadrados de terreno, según el
Departamento Forestal y de Protección contra Incendios del estado.