LA DETECCIÓN del virus de covid-19 en la transpiración de
los humanos es un procedimiento que está siendo desarrollado por investigadores
tailandeses, los cuales realizaron durante esta semana en Bangkok una prueba a
escala real.
Los científicos visitaron los pasillos de un popular mercado
de la capital tailandesa, en el lugar, un hombre y una mujer con monos
protectores solicitaron a un vendedor que se colocara un hisopo debajo de una
axila.
Quince minutos más tarde, la varilla se introdujo en un tubo
de vidrio, esterilizado con rayos aultravioleta UV y la muestra tomada fue
analizada. Treinta segundos más tarde se determinó el resultado: negativo.
Este método es un “95 por ciento fiable”, un resultado
comparable al del PCR nasal, de acuerdo a las primeras pruebas realizadas sobre
una muestra aleatoria de 2.000 personas, afirma a la AFP el investigador Chadin
Kulsing, de la universidad Chulalongkorn de Bangkok, que despliega estas
unidades móviles de detección.
Su equipo ya había lanzado un experimento con perros
rastreadores de la transpiración humana para detectar casos asintomáticos de
covid-19 y el nuevo proyecto en desarrollo es complementario.
“Las personas infectadas por covid-19 secretan sustancias
químicas distintas”, destaca el científico. “Este hallazgo nos ha
permitido desarrollar un dispositivo para detectar olores específicos
producidos”, por los infectados por coronavirus, prosigue.
Tailandia tampoco es el primer país en utilizar la
transpiración para detectar el covid-19, el Reino Unido y Estados Unidos, en
particular, han lanzado experimentos similares.
Sin embargo, Kulsing aspira a que su método de detección,
aún en fase experimental, pueda utilizarse pronto como alternativa al PCR, que
requiere un procesamiento en laboratorio y, en consecuencia, resulta mucho más
caro.
“También es mucho más práctico”, señala un vendedor del
mercado. No necesito ir a un centro de análisis y “puedo seguir trabajando en
tanto espero el resultado”, explica. En Tailandia se han constatado
alrededor de 1,5 millones de casos y casi 14.000 muertes, en su mayoría en los
últimos meses