Un sacerdote ortodoxo fue detenido este sábado en Grecia luego de increpar al papa Francisco en el marco de su visita al país.
Eres un hereje”, exclamó el religioso en Atenas cuando Francisco llegó a la residencia del arzobispo Jerónimo II, jefe de la Iglesia Ortodoxa griega, para una reunión.
El sacerdote fue rápidamente abordado por la policía, que se lo llevó detenido.
Por su parte, el pontífice pareció no darse cuenta del incidente mientras caminaba hacia la reunión.
En contraste con la actitud del manifestante, Jerónimo II recibió a Francisco "con un sentimiento de honor y fraternidad".
Francisco pide perdón
Luego del encuentro, Francisco renovó la petición de "perdón" de los católicos a los ortodoxos, refiriéndose a los "errores" y a la "vergüenza" de la Iglesia, 20 años después del gesto simbólico de Juan Pablo II.
Durante su visita a Atenas en mayo de 2001, Juan Pablo II había pedido "perdón" a los ortodoxos, separados de la Iglesia católica desde el cisma de 1054 entre Roma y Constantinopla.
La historia tiene peso, y hoy siento la necesidad de renovar mi pedido de perdón a Dios y a mis hermanos por los errores cometidos por muchos católicos", agregó Francisco.
Este sábado, el papa Francisco se presentó "con mucho respeto y humildad" y se refirió a las "raíces comunes" de ambas Iglesias, que han "atravesado siglos".
También lamentó que hayan "crecido lejos las unas de las otras".
"Los venenos del mundo nos han contaminado, la semilla de la sospecha ha aumentado nuestra distancia y hemos dejado de cultivar la comunión", deploró, antes de hablar extensivamente de su aspiración a la "fraternidad".