Las autoridades de Quintana Roo informaron el martes, 25 de enero de 2022, que el homicidio de los dos canadienses en un complejo vacacional el 21 de enero se debió aparentemente a un ajuste de cuentas por una deuda no pagada entre bandas de criminales.
“Este ataque se deriva de una deuda económica por las actividades ilícitas transnacionales en las que participaban las víctimas”, quienes presuntamente estaban vinculadas, entre otros delitos, al tráfico de armas y drogas, indicó el fiscal estatal, Oscar Montes de Oca.
Montes de Oca anunció también la detención de un hombre y una mujer como dos de los presuntos implicados en los homicidios ocurridos en el hotel Xcaret, un complejo de lujo al sur de Playa del Carmen.
Según la información ofrecida por las autoridades, ambos muertos tenían antecedentes penales en Canadá. Una tercera persona canadiense, la mujer que resultó herida, está hospitalizada y todavía no está en condiciones de ofrecer testimonio.
Montes de Oca señaló que el resto de personas que venían con las víctimas también están siendo investigadas.
El hombre detenido fue contratado para llevar a cabo los homicidios y con ese fin se trasladó con dos sicarios de Ciudad de México a Quintana Roo días antes del ataque.
Sin embargo, continuó explicando el fiscal, esas dos personas no llevaron a cabo los asesinatos debido a que había mucha presencia policial dentro y fuera del hotel.
Fue entonces cuando llegó al estado un tercer individuo que es el que finalmente lo hizo y luego huyó escondido en el maletero de un vehículo donde le esperaba el detenido. El presunto autor material sigue prófugo.
La otra persona arrestada es una mujer extranjera que estaba en el grupo de las víctimas y habló con el homicida justo antes de los disparos.
El fiscal señaló que los atacantes tenían información de la ubicación de las víctimas en tiempo real y que pudieron entrar al hotel con brazaletes como si fueran visitantes.
Que haya bandas canadienses en el Caribe mexicano no sería sorprendente ya que esta costa ha interesado a redes criminales con conexiones internacionales debido a su gran flujo de extranjeros.
Las autoridades mexicanas detuvieron a integrantes de una banda rumana que operó en el estado utilizando cajeros automáticos para clonar tarjetas de crédito o hacer retiros ilegales. Y esta semana, arrestaron a dos ucranianos por su presunta participación en una red de robo de combustible. Además, los traficantes de migrantes han utilizado durante mucho tiempo Cancún como base para el contrabando de cubanos.
Pero los ataques de la semana pasada sembraron el pánico porque se suman al tiroteo que se registró en noviembre en una localidad cercana, Puerto Morelos, que dejó dos muertos (presuntamente traficantes de droga) y a otro incidente de octubre en Tulum en el que murieron dos turistas que quedaron en medio de un fuego cruzado.
En todos estos casos, el miedo se propagó entre los turistas al escuchar los disparos y las imágenes que circularon por las redes sociales que rompieron la imagen idílica de este privilegiado destino turístico del sureste mexicano.
Tras los incidentes del año pasado, el gobierno envió a Quintana Roo un batallón de refuerzos de la Guardia Nacional para garantizar la seguridad.
Con información de AP