Venecia es uno de los grandes enclaves turísticos del mundo. Sus canales, sus góndolas y su unicidad la convierten en un destino muy apreciado por los viajeros. Sin embargo, en los últimos días de enero de 2022 está experimentando un fenómeno que prácticamente ha dejado sin agua la ciudad.
Se conoce como agua baja y se produce por las mareas. Es lo contrario al agua alta, que suele producir inundaciones. Tradicionalmente, los valores habituales están entre los 50 y los 79 centímetros y cuando se supera esta cifra, la plaza de San Marcos y otras calles se llenan de agua.
En esta ocasión, los bajos niveles de agua han provocado que un gran número de góndolas no pudieran salir a navegar, además de producirse graves problemas de tráfico marítimo.
