López Obrador aseguró que nadie puede probar que él tenga vínculos con la delincuencia organizada, y acusó que eso es una campaña que se echó a andar en redes sociales para pretender nexos de su gobierno con delincuentes.
Durante la conferencia de prensa matutina, el mandatario nacional manifestó que cuando se da una relación estrecha por corrupción si hay contubernio pues no se avanza.
"Eso no existe en el gobierno, tan no existe que para atacarnos inventan, como un estudio de que empezaron a manejar de que el gobierno, yo, tenía vínculos con el crimen organizado, no pueden probar nada porque sencillamente nosotros tenemos principios e ideales. No hay ninguna prueba", aseveró.
El presidente detalló que se dio seguimiento al movimiento de las cuentas en redes sociales en la que comenzó esa campaña y se puede probar que hay varias cuentas asociadas y también se dio de inmediato la repetición por parte de expertos que son contrarios al gobierno federal.
"Es posible que sí se maneje (esa campaña) desde el extranjero", indicó.
El mandatario habló también que posiblemente sigan existiendo vínculos del crimen organizado en corporaciones policías en algunos municipios, pero ya "no es la regla, es la excepción".
Expresó que limpiar es un proceso y lo principal es acabar con la corrupción y la impunidad.
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López Obrador aseguró también que no es lo mismo Rosa Icela Rodríguez, actual secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, que García Luna, quien fuera secretario de seguridad en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, y que está preso en Estados Unidos, acusado de vínculos con criminales.
"Porque todavía no notan la diferencia. Ahora que los fiscales de Estados Unidos declaran que García Luna tenía sobornado a periodistas y que además tenía pensado eliminar a cómplices o testigos, y se transmitía la noticia en todos los medios, no salió en programas de radio ni en los periódicos, no salió en la 'telera', no fue nota", criticó.
Sostuvo que el mismo ex presidente Felipe Calderón no salió a hablar del tema y lo tachó de ingratitud.
"Entonces sí hay diferencia, lo importante es que no se permita el contubernio, no se asocie la autoridad con la delincuencia, que se marque bien la raya, una cosa es la autoridad y otra la delincuencia", afirmó.
