Tesla ha despedido alrededor de 200 trabajadores dedicados al funcionamiento de Autopilot, el sistema de ayuda a la conducción de los vehículos del fabricante estadounidense, días después de que su consejero delegado, Elon Musk, anunciase su intención de reducir la plantilla.
Según señalaron este miércoles medios de comunicación locales, los despidos se concentran en los empleados de una oficina en San Mateo, en el estado de California, que etiquetaban imágenes callejeras, como señales de tráfico, para facilitar la automatización de la conducción de los vehículos de Tesla.
Este trabajo es fundamental para mejorar los sistemas de inteligencia artificial que permiten el funcionamiento de los servicios de ayuda a la conducción.
El etiquetado de las imágenes es considerado como un trabajo vital pero sin grandes necesidades de capacitación que puede ser subcontratado a personal en otras jurisdicciones donde la mano de obra es más barata.
A principios de junio, Musk anunció a los empleados de Tesla la reducción de un 10 % la fuerza laboral de la compañía aunque posteriormente matizó que los despidos sólo afectarían a los empleados de oficina, lo que supondría la eliminación de un 3,5 % del total de la plantilla.
Musk justificó la decisión al señalar que, en el pasado, Tesla había contratado en exceso.
En una entrevista publicada hoy en Business Insider, Quishon Walker, quien se identificó como uno de los trabajadores despedidos de Tesla, dijo que su vida ha cambiado radicalmente "para que un mil millonario pueda ahorrar algo de dinero".
La semana pasada, Musk declaró en una entrevista que las plantas de montaje de baterías y vehículos que Tesla tiene en Texas (EU) y Berlín están perdiendo "miles de millones de dólares" por problemas logísticos que están impidiendo aumentar su producción.