Los amparos contra el Tren Maya en su tramo 5 son como la declaratoria de “moratoria constitucional” declarada por la oposición, nada más estorban.
En medio de ese señalamiento, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que su gobierno presentará una denuncia internacional en contra de la empresa Calica por provocar una catástrofe natural en Playa del Carmen y de paso, emplazó a los integrantes de la alianza Va por México a que ratifiquen, en menos de 24 horas ante todo el pueblo, su deseo de no trabajar en beneficio del país.
López Obrador aseguró que se podrá conocer el sureste en tren a partir del próximo año porque los amparos que existen en contra de la obra carecen de fundamentos.
"Eso lo vamos a inaugurar a finales del año próximo, porque los amparos de este tramo no tienen ningún sustento, es nada más estorbar, es como los legisladores, ya vieron lo que resolvieron, huelga de legislación (...) lo repito: si no van a legislar, que esa es su función principal, si declaran moratoria a legislar, es como una huelga, pues que dejen de cobrar y ya cuando quieran legislar que no anuncien" manifestó desde Palacio Nacional.
De acuerdo con el mandatario, al bloquear toda reforma constitucional que él promueva los conservadores y los que se creían dueños de México pretenden, por ejemplo, que la Guardia Nacional quede en manos de un Genaro García Luna al depender de la Secretaría de Gobernación o de la Secretaría de Seguridad Pública.
Sin embargo, López Obrador advirtió que su gobierno velará para que ese cuerpo de seguridad "no se pudra" como sucedió con la Policía Federal debido a que la gente demanda su presencia y función.
Ellos, los que no quieren que se proteja al pueblo, porque están protegiendo a delincuentes, siempre han defendido a delincuentes, de cuello blanco y de delincuencia organizada, lo que quieren es que la Guardia Nacional dependa de la Secretaría de Seguridad Pública o de la Secretaría de Gobernación para que un civil como García Luna sea el que maneje la Guardia Nacional", sostuvo ante los medios de comunicación.
En ese sentido, el presidente dijo que los marinos y soldados de México siempre actúan con responsabilidad y depende de quién sea su comandante supremo de los aciertos y errores que llevan a cabo.
En el caso de la masacre estudiantil de 1968 en el país, López Obrador puso en duda la responsabilidad del entonces secretario de la Defensa Nacional, Marcelino García Barragán, en los hechos y la trasladó a su jefe, el entonces presidente de México, Gustavo Díaz Ordaz.
Aseguró que "los errores" que se han cometido por parte de las fuerzas armadas son por las órdenes que reciben del más alto nivel.