Una joven del Reino Unido, Sian Anderson, estuvo al borde de la muerte después de haber contraído una peligrosa infección que la llevó al coma.
De acuerdo con el informe médico, la infección que sufrió Anderson fue causada por la meningitis bacteriana, una enfermedad rara que provocó una inflamación grave alrededor de su cerebro, según reportó el Daily Mail.
Todo esto ocurrió, aparentemente, por compartir su cigarro electrónico (vapeador) y tomar de la misma botella que otros.
Meningitis bacteriana: la causa detrás del estado de coma
Los médicos que atendieron a Sian diagnosticaron que la joven, de 18 años, había contraído meningitis bacteriana.
Esta enfermedad se caracteriza por una inflamación de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal, y puede ser mortal si no se trata de manera inmediata.
Los primeros síntomas que experimentó la joven fueron:
Manchas rojas y moradas en su piel
Estos síntomas fueron empeorando con el paso del tiempo, lo que llevó a su madre, Kerry, a llevarla al Hospital Universitario de Norfolk y Norwich.
El momento crítico: una despedida anticipada
Al llegar al hospital, Sian perdió rápidamente la conciencia.
Lo último que recuerdo es entrar en la entrada del hospital. Sabía que me dolía mucho y me costaba moverme, así que me senté en una silla de ruedas, pero luego lo veo borroso”, comentó la joven en entrevista con el Daily Mail.
La situación de Sian se complicó de tal forma que su madre fue informada por los médicos de que la joven estaba en estado crítico.
Según la madre, los médicos indicaron que lo más probable es que la infección se hubiera originado por el uso compartido del vapeador, aunque aún no está claro si esta fue la causa definitiva.
A Sian la pusieron en coma inducido y los médicos y especialistas nos dijeron que estaba muy mal. Teníamos que prepararnos para lo peor y despedirnos”, relató Kerry, quien añadió que los profesionales de salud le indicaron que era probable que su hija no saliera del coma.
Recuperación y convalecencia
A pesar de lo grave de su situación, Sian logró recuperarse y ahora se encuentra en proceso de convalecencia, aunque todavía está bajo atención médica.
Su caso ha llamado la atención sobre los riesgos de compartir dispositivos de vapeo y bebidas, prácticas aparentemente inocuas que pueden tener consecuencias muy serias para la salud.