Noticias de Yucatán
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Se explicó que la razón de este nuevo requisito son las frecuentes quejas de quienes acuden a la oficina a señalar que las sepulturas de sus parientes fueron manchadas con pintura o material de construcción por parte de quienes arreglaron tumbas adyacentes. La nueva disposición pretende evitar eso.
Hasta el año pasado, en los cinco cementerios de esta ciudad habían unas 68 mil sepulturas. Tan sólo Xoclán tenía 33 mil tumbas, y si todos los deudos decidieran pedir el permiso en los dos días de las conmemoraciones, la oficina tendría que laborar noche y día sin parar y emitir 687 autorizaciones por hora.
Luego de que la Jefatura de Panteones estableciese la obligatoriedad de un permiso para pintar, reparar o remodelar un sepulcro, se ha generado inconformidad entre la población.
Sin embargo, en Xoclán no pudieron explicar cómo harán para atender las miles de solicitudes que les llegarían en estas fechas, ni cómo vigilarán a todos los que decidan pintar y hacer modificaciones a las bóvedas y monumentos funerarios.
Un empleado aseguró que sí podrán atender la demanda porque el llenado del formato es rápido.
Esto implicaría atender, en promedio, a 11 personas por minuto.
El Cementerio General tiene unos 26 mil sepulcros, de modo que ahí también habría problemas en estas fechas.
Los otros panteones de esta capital son el Florido (con unas 4,500 tumbas), Jardín de Paz (con 2,000) y Chuburná (con 560).