Noticias de Yucatán
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A dos semanas de iniciada la limpieza de vendedores ambulantes de las primeras nueve manzanas del Centro Histórico de Mérida, las calles se ven, en su mayoría, libres de este comercio, aunque en algunas de ellas persisten los vendedores de frutas, aguas frescas, kibis y bisutería.
Aún se observa a varios vendedores en algunas calles
En un recorrido por las principales calles que conformaron la primera etapa del desalojo de vendedores ambulantes se observaron unos 35 puestos semifijos, principalmente en las calles 67 entre 60 y 62; 60 entre 67 y 65, y 58 entre 65 y 69.
La 56 es de las vías que presenta mayor número de puestos semifijos en las aceras, pero en su mayoría son exhibiciones de mercancías de comercios aledaños.
Aquí se contaron unos 20 puestos o estructuras en el tramo de acera que va de la 67 a la 65-A, la que pasa a un costado de los mercados San Benito y Lucas de Gálvez y finaliza en el antiguo Portal de Granos.
Ventiladores, juguetes, ropa, quesos de bola, mantequillas, aparatos eléctricos y de cómputo son algunas de las mercancías que se ofrecen a los transeúntes.
En la misma 56, pero en la acera que pasa frente al Museo de la Ciudad, se ubican seis vendedores de frutas y uno de discos y películas.
Entre las calles que se encuentran libres de ambulantes destacan la 60, en el sector que va desde la 65 hasta la 55 (Santa Lucía); la 58, desde la 55 hasta la 65; la 56 entre 69 y 71; la 54 entre 59 y 65, y la 54 entre 67 y 69.
La calle 54, en el tramo comprendido entre la 65 y 67, es otro punto complicado, pues aquí se ubican unos 30 ambulantes principalmente de frutas, quienes no sólo invaden las aceras, sino hasta la vía asfáltica, poniendo en riesgo su vida y la de los peatones, quienes tienen que caminar sobre la calle.
Otro punto dominado por el comercio informal es la calle 65 entre 54 y 56, mejor conocida como la Calle Ancha del Bazar.
Ahí se ubican unos 40 ambulantes de todo tipo de mercancías, desde frutas y flores, hasta bisutería, ropa, discos y películas, accesorios para celulares y demás.
El Pasaje Emilio Seijo, con entradas por la 60 y la 58, se observa libre de vendedores ambulantes, no así el Yucatán, que va del Portal de Granos a la calle 58, donde los comerciantes informales ocupan los arriates para exhibir su mercancía de ropa, calzado y alimentos, entre otros productos.
