Según aseguran los vecinos del lugar, Esmeralda es adicta al alcohol y al tabaco y tiene un hijo de año y tres meses.
La mujer se salvó de puro milagro, ya que se arrojó desde una altura de más de tres metros de altura.
Familiares de la joven al acudir a su auxilio se dieron cuenta de que no respiraba por lo que dieron aviso a la Policía Municipal y a paramédicos de la Cruz Roja.
Minutos después llegaron los socorristas que le brindaron los primeros auxilios a la joven madre y solo tuvo lesiones leves.
Logra su cometido
Por otro lado, Manuel M. se quitó ayer la vida en su propia casa en la colonia San Lázaro, de Umán, por causas aún desconocidas, según reportó la Policía Municipal de esa ciudad.
Según el informe preliminar, el señor se embriagaba en su domicilio, acompañado de uno de sus hijos y de un amigo de ambos.
Cuando se agotó la bebida, su hijo salió en busca de más cervezas, junto con el otro compañero, pero cuando regresaron Manuel ya se había colgado.
El hijo descubrió el cuerpo y aunque hizo todo lo posible por descolgarlo, su padre ya había fallecido.