Varios choferes de Uber nos han comentado que al parecer algunos pasajeros los han traicionado, pues a pesar de que se han puesto de acuerdo con ellos para que digan que son sus parientes, conocidos o amigos, en caso de ser detenidos, en realidad quienes están en sus vahículos son policías vestidos de civil quienes solicitan el servicio, para llevarlos a una detención segura.
Por ello, cuando ocurre la detención los supuestos pasajeros no sólo niegan que los conozcan sino que incluso aseguran que los conductores son choferes de Uber.
Esta es una estrategia, que según se nos informa, salió del Palacio de Gobierno, como una forma de tratar de evitar detener a ciudadanos que no tienen nada que ver con Uber.
La cacería es contra Uber, para beneficio del FUTV.
