Noticias de Yucatán
Nueva Zelanda.- Mientras nadaba frente a la costa Rarotonga, en las Islas Cook, la bióloga Nan Hauser fue protegida por una ballena del inminente ataque de un tiburón tigre.
Para Hauser y su equipo, es habitual encontrarse con estas especies durante su trabajo, pero ese día de octubre, fueron testigos de un acto de increíble protección del cetáceo, que además, logró ser capturado en video.
La bióloga se encontraba sumergida en el agua y su equipo de trabajo estaba en el bote, cuando comenzó a bucear cerca de la ballena. De repente comenzó a percibir un comportamiento extraño, y en ese instante vio que otro animal se acercaba de forma amenazante.
En su afán de protegerla, la ballena colocó una de sus aletas debajo del cuerpo de Nan y luego utilizó su cabeza para empujarla y alejarla del tiburón tigre.
“Nunca había visto una ballena tan insistente para tratar de meterme debajo de su enorme aleta pectoral. Traté de alejarme de ella por temor a que si me golpeaba demasiado fuerte con sus aletas o cola, eso me rompería los huesos. No quería entrar en pánico, porque sabía que ella se daría cuenta de mi miedo. Me mantuve tranquila hasta cierto punto, pero estaba segura de que probablemente iba a ser un encuentro mortal “, dijo la biólogo a The Mirror.
Al volver al bote con sus compañeros, puedo comprobar en la grabación que otra ballena golpeaba el agua con su cola para alejar al amenazante tiburón.
Ese día, la bióloga pudo constatar el impresionante "poder intuitivo" de las ballenas.
Nueva Zelanda.- Mientras nadaba frente a la costa Rarotonga, en las Islas Cook, la bióloga Nan Hauser fue protegida por una ballena del inminente ataque de un tiburón tigre.
Para Hauser y su equipo, es habitual encontrarse con estas especies durante su trabajo, pero ese día de octubre, fueron testigos de un acto de increíble protección del cetáceo, que además, logró ser capturado en video.
La bióloga se encontraba sumergida en el agua y su equipo de trabajo estaba en el bote, cuando comenzó a bucear cerca de la ballena. De repente comenzó a percibir un comportamiento extraño, y en ese instante vio que otro animal se acercaba de forma amenazante.
En su afán de protegerla, la ballena colocó una de sus aletas debajo del cuerpo de Nan y luego utilizó su cabeza para empujarla y alejarla del tiburón tigre.
“Nunca había visto una ballena tan insistente para tratar de meterme debajo de su enorme aleta pectoral. Traté de alejarme de ella por temor a que si me golpeaba demasiado fuerte con sus aletas o cola, eso me rompería los huesos. No quería entrar en pánico, porque sabía que ella se daría cuenta de mi miedo. Me mantuve tranquila hasta cierto punto, pero estaba segura de que probablemente iba a ser un encuentro mortal “, dijo la biólogo a The Mirror.
Al volver al bote con sus compañeros, puedo comprobar en la grabación que otra ballena golpeaba el agua con su cola para alejar al amenazante tiburón.
Ese día, la bióloga pudo constatar el impresionante "poder intuitivo" de las ballenas.