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(proceso.com.mx).- Integrantes del grupo de autodefensa de la organización denominada Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del estado de Guerrero (Fusdeg), bloquearon durante más de tres horas una carretera estatal porque militares decomisaron un fusil a un miembro de la guardia comunitaria.
En respuesta, el gobierno de Héctor Astudillo Flores y los mandos de la IX Región Militar cedieron a la presión del grupo armado y regresaron el rifle M1 de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas para destrabar el conflicto y liberar la vía que conecta la región Centro con la Costa Chica.
Reportes oficiales de la 35 Zona Militar, refieren que personal del 68 batallón de Infantería, al mando del Coronel Alfredo González Cueva, interceptaron a dos policías comunitarios del Fusdeg y a uno de ellos le decomisaron un fusil M1, argumentando que el arma no puede ser portada por civiles porque lo prohíbe la ley.
Enseguida, 60 habitantes de la comunidad de La Palma, municipio de Juan R. Escudero bloquearon la carretera estatal que conecta con los municipios de Ayutla y Tecoanapa para exigir la devolución del arma a la guardia comunitaria.
Durante más de tres horas, funcionarios estatales y mandos del Ejército estuvieron negociando con los lideres del grupo de autodefensa en su base, ubicada en el poblado de Tierra Colorada.
Finalmente, los militares y los representantes del gobierno estatal accedieron a la presión del grupo armado y regresaron el fusil decomisado a cambio de que los guardias comunitarios desbloquearan la carretera.
Este hecho, exhibe el nivel de fuerza que tienen los grupos de autodefensa que operan en la entidad y el doble discurso del gobernador Astudillo, quien ha declarado que “nadie puede actuar” por encima de la legalidad pero tolera que las guardias comunitarias porten fusiles de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
(proceso.com.mx).- Integrantes del grupo de autodefensa de la organización denominada Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del estado de Guerrero (Fusdeg), bloquearon durante más de tres horas una carretera estatal porque militares decomisaron un fusil a un miembro de la guardia comunitaria.
En respuesta, el gobierno de Héctor Astudillo Flores y los mandos de la IX Región Militar cedieron a la presión del grupo armado y regresaron el rifle M1 de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas para destrabar el conflicto y liberar la vía que conecta la región Centro con la Costa Chica.
Reportes oficiales de la 35 Zona Militar, refieren que personal del 68 batallón de Infantería, al mando del Coronel Alfredo González Cueva, interceptaron a dos policías comunitarios del Fusdeg y a uno de ellos le decomisaron un fusil M1, argumentando que el arma no puede ser portada por civiles porque lo prohíbe la ley.
Enseguida, 60 habitantes de la comunidad de La Palma, municipio de Juan R. Escudero bloquearon la carretera estatal que conecta con los municipios de Ayutla y Tecoanapa para exigir la devolución del arma a la guardia comunitaria.
Durante más de tres horas, funcionarios estatales y mandos del Ejército estuvieron negociando con los lideres del grupo de autodefensa en su base, ubicada en el poblado de Tierra Colorada.
Finalmente, los militares y los representantes del gobierno estatal accedieron a la presión del grupo armado y regresaron el fusil decomisado a cambio de que los guardias comunitarios desbloquearan la carretera.
Este hecho, exhibe el nivel de fuerza que tienen los grupos de autodefensa que operan en la entidad y el doble discurso del gobernador Astudillo, quien ha declarado que “nadie puede actuar” por encima de la legalidad pero tolera que las guardias comunitarias porten fusiles de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.