Un alce salvaje entró al territorio de una casa particular en Anchorage, la mayor ciudad del estado estadounidense de Alaska, y llegó a adentrarse hasta el garaje, donde apretó accidentalmente el botón del timbre,informa la agencia AP.
Los inquilinos, el matrimonio Stultz, se encontraban en casa en ese momento. Cuando oyeron el timbre creyeron que era algún niño que quería gastar una broma, pero cuando abrieron la puerta no vieron nada inusual. Más tarde, decidieron revisar las grabaciones de las cámaras de vigilancia, y fue entonces cuando descubrieron que quien había tocado el timbre era un alce, y que además lo había hecho con el trasero.