Figuras como Miguel Ángel Mancera, Xóchitl Gálvez y Tatiana Clouthier llegaron a alcanzar un cargo aliados con algunos partidos sin afiliarse a ellos. Defienden sus agendas, coinciden con la ideología de las fuerzas políticas que representan, aunque algunas veces también se mantienen críticos. Aquí un recuento.
El coordinador del PRD en Senado, Miguel Ángel Mancera, llegó a la Cámara Alta en alianza con el PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, por la vía de representación proporcional, aunque finalmente quedó registrado como legislador perredista no está afiliado a ese partido.
Cabe recordar que previamente, cuando ocupó la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México, fue también respaldado por el PRD. En algún momento se dijo que podría afiliarse al partido, sin embargo, hasta ahora no lo ha hecho y la bancada que lidera en el Senado cada vez de debilita más.
Otro caso similar es el de la vicecoordinadora de Morena en San Lázaro, Tatiana Clouthier, que llegó al Congreso por la vía plurinominal, además fue coordinadora de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien apoyó desde tiempo atrás, previo a llegar a la candidatura.
Clouthier tuvo un papel muy relevante durante la campaña de AMLO, incluso fue vista como figura principal del partido, sin embargo nunca ha sido militante, la propia dirigente nacional del partido marrón, Yeidckol Polevnsky ha destacado que Clouthier es independiente al partido.
Xóchitl Gálvez llegó al Senado por la coalición “Por México al Frente” integrada por PAN-PRD-MC, caso similar al de Mancera, finalmente se quedó en la bancada de Acción Nacional.
La legisladora incluso tuvo el apoyo de los panistas al llegar a la Alcaldía de Miguel Hidalgo, pese a no militar en el blanquiazul, ella siempre ha mantenido su postura a favor de la comunidad LGBTTTI a diferencia de la visión conservadora del partido.
El primer gobernador no priista en Quintana Roo, Carlos Joaquín González llegó como mandatario de la entidad por alianza PAN-PRD, tampoco es militante de esas fuerzas. En su historial político está su paso por el PRI y su posterior ruptura, porque postuló a la gubernatura a Mauricio Góngora Escalante, afín al grupo de Félix González y Roberto Borge.
Finalmente, no podemos dejar de recordar el caso de otro personaje político, que pese a que no llegó a consolidarse en el cargo, lo busco sin ser militante del tricolor, se trata de José Antonio Meade. Él fue candidato presidencial del PRI en las pasadas elecciones del 2018, convirtiéndose en la primera apuesta del tricolor por un abanderado que no militara en ese partido, aunque no tuvo éxito.
Cabe destacar que Meade además fue secretario de Estado en la administración de Enrique Peña Nieto al igual que durante la administración panista de Felipe Calderón y nunca se afilió a esos partidos.
