La aparición de nuevos casos de coronavirus en países donde
ya se había levantado las cuarentenas o medidas de restricción reaviva los
temores de nuevos picos de infección.
En los últimos días se han registrado nuevos contagios en
ciudades que ya levantaron algunas restricciones como Alemania, en donde los
nuevos grupos estaban vinculados a tres mataderos; Wuhan, la ciudad china donde
comenzó la crisis, y Corea del Sur, donde un solo cliente de un club nocturno
estaba vinculado a 85 casos nuevos.
Un alto funcionario de la Organización Mundial de la Salud
(OMS) advirtió este lunes que algunos países están ‘conduciendo a ciegas’ la
reapertura de sus economías sin establecer un fuerte rastreo de contactos para
combatir los brotes del coronavirus.
La advertencia se produjo después de los nuevos casos en
estos países, y luego de que Francia y Bélgica salieron de sus cuarentenas,
Países Bajos envió a los niños de regreso a la escuela y muchos estados de
Estados Unidos presionaron para levantar las restricciones comerciales.
Las autoridades han advertido que la enfermedad podría
volver sin pruebas y rastreo generalizados de los contactos de las personas
infectadas.
El jefe de emergencias de la Organización Mundial de la
Salud, Michael Ryan, dijo que las sólidas medidas de rastreo de contactos
adoptadas por Alemania y Corea del Sur brindan la esperanza de que esos países
puedan detectar y detener los grupos de virus antes de que se salgan de
control. Pero apuntó que lo mismo no aplica para otras naciones que salen de
sus cuarentenas.
Más de 10 mil personas están involucradas en la búsqueda de
contactos en Alemania, un país de 83 millones, o aproximadamente una cuarta
parte del tamaño de Estados Unidos.
El ministro de salud de Francia prometió durante semanas un
seguimiento de contactos robusto y prometió que el país evaluaría a 700 mil
personas por semana. Este lunes, el tribunal más alto de la nación ordenó al
gobierno que tenga mucho cuidado en proteger el derecho a la privacidad, lo que
arroja dudas sobre cómo proceder.
En Estados Unidos, donde los funcionarios de salud
observarán de cerca en los próximos días cualquier resurgimiento del virus dos
semanas después de que los estados comenzaron a reabrir gradualmente, el
rastreo de contactos es un mosaico de enfoques y niveles de preparación. Los
estados están luchando por contratar y capacitar a los rastreadores, y los expertos
dicen que el país necesitará atraer a cientos de miles de ellos.
Al relajar las medidas, las autoridades alemanas han
determinado un nivel específico de nuevos casos que podría conducir a la
reimposición de restricciones en algunas áreas. Otros países, y Estados Unidos,
han sido imprecisos sobre lo que sería suficiente para desencadenar otra
contención.
En Corea del Sur, el Gobierno reprimió nuevamente,
deteniendo las reaperturas escolares planeadas para esta semana y volviendo a
imponer restricciones a los clubes nocturnos y bares.
India informó su mayor aumento diario de casos, incluso
cuando se preparó para reanudar el servicio de trenes.
En Sudáfrica, las autoridades de Ciudad del Cabo y la
provincia circundante consideraron volver a imponer restricciones porque el
área se ha convertido en un punto crítico que representa aproximadamente la
mitad de las 200 muertes por virus del país.
El primer ministro británico , Boris Johnson, anunció una
moderada reducción del bloqueo del país, pero instó a los ciudadanos a no
‘tirar por la borda’ el progreso logrado. Algunas personas, sin embargo,
estaban confundidas cuando el Gobierno cambió su eslogan de “Quedarse en casa”
a “Quedarse alerta”. Escocia, Gales e Irlanda del Norte se apegaron al viejo
lema.
En todo el mundo, el virus ha infectado a más de 4 millones
de personas y ha causado la muerte de más de 285 mil, según un recuento de la
Universidad Johns Hopkins. Los expertos creen que esos números subestiman el
costo real del brote.
Fuente: El Financiero.