MÉXICO.- Al menos cuatro de los llamados súperdelegados
del gobierno federal en los estados consiguieron la candidatura de Morena
a sus respectivas gubernaturas con lo que se cumplió la advertencia de sus
adversarios: que aprovecharían sus cargos para posicionarse políticamente.
Juan Carlos Loera, en Chihuahua; Lorena Cuéllar, en
Tlaxcala; Indira Vizcaíno, en Colima; y Victor Manuel Castro, en Baja
California Sur, lograron su nominación.
Como delegados de los programas de Bienestar en sus estados,
los ahora precandidatos viajaron por los municipios, sostuvieron encuentros con
pobladores, ofrecieron apoyos, supervisaron obras, participaron en reuniones de
seguridad y dejaron registro en redes sociales de prácticamente todas sus
actividades públicas.
En espera de una eventual designación se encuentra el
también ex superdelegado Pablo Amílcar Sandoval, en Guerrero. También están
pendientes las nominaciones de Michoacán, San Luis Potosí y Sinaloa.
Pese a que desde el gobierno federal se les pedía no promocionar
su imagen en redes sociales, todos los ahora candidatos subían fotos abrazando,
comiendo y entregando recursos a nombre de la presidencia de la
República.
Asimismo, coinciden en que en algún momento todos fueron
señalados por la Oposición, incluso por propios correligionarios, de
promocionar su imagen antes de tiempo.
Omisión a no promocionar su imagen
Tal es el caso de Lorena Cuéllar, quien el 8 de octubre en
sus redes sociales publicó una imagen donde promocionaba al partido Morena,
cuando todavía no renunciaba a su función federal. "La transformación
de Tlaxcala comienza ya", decía la imagen.
Juan Carlos Loera fue elegido el 20 de diciembre, pese a que
en noviembre la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales inició una
carpeta por presunto uso de programas sociales para promocionar su
imagen.
De acuerdo con reportes locales, el enlace de Bienestar
entregó folletos, tarjetas personalizadas con su nombre, redes sociales y
rostro, así como también apareció en espectaculares resaltando su
nombre y los programas federales.
En octubre de 2019, la Secretaría de la Función Pública
reveló que 10 superdelegados, entre ellos Juan Carlos Loera e Indira Vizcaíno,
eran investigados por el supuesto uso electoral de programas de Bienestar,
pero, a más de un año, no hay sanciones.
Incluso, la diputada federal de Colima, Claudia Yáñez, acusó
a Vizcaíno ante la Secretaria de Bienestar, Luisa María Albores, por el presunto
uso electoral de programas para atender la pobreza en la entidad.
En noviembre de 2018, previo a la creación de los
"superdelegados", 12 gobernadores del PAN acusaron que esta figura
era una imposición del presidente Andrés Manuel López Obrador en los
estados para controlar los recursos de los programas sociales y las acciones de
seguridad.
En otro contexto, pero también aprovechando la exposición de
su cargo, la maestra Delfina Gómez, súperdelegada en el Estado de
México, ahora formará parte del gabinete federal, al ser nombrada Secretaria de
Educación.