Un anciano hospitalizado en el sur de California para recibir tratamiento por Covid-19 fue golpeado fatalmente por un compañero de cuarto que se molestó cuando la víctima comenzó a orar, dijo el miércoles el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles, Estados Unidos.
La víctima de 82 años fue golpeada con un tanque de oxígeno el 17 de diciembre mientras estaba alojada en una habitación para dos personas en el Hospital Antelope Valley en Lancaster y murió al día siguiente, dijo el departamento en un comunicado. Su nombre no fue revelado.
El sospechoso, Jesse Martínez, de 37 años, fue arrestado y acusado de asesinato y otros delitos, dijo el departamento.
Martínez está detenido con una fianza de un millón de dólares y tiene programada una comparecencia inicial ante el tribunal el 28 de diciembre. No se sabe de inmediato si tiene un abogado que pueda hablar en su nombre.
El Departamento del Sheriff dijo que la investigación continuaba. Los dos hombres recibían tratamiento contra Covid-19 y no se conocían entre sí.
Hospitales de Los Ángeles con niveles bajos de suministros y oxígeno
Los hospitales del condado de Los Ángeles se están quedando con niveles “peligrosamente bajos de tanques de oxígeno”, y otros suministros para combatir la pandemia de coronavirus, y los pacientes ya comienzan a esperar en las ambulancias antes de ser admitidos en los centros de cuidado especializado, informó este viernes el periódico Los Angeles Times.
Los residentes de Los Ángeles se despertaron esta Navidad con la noticia de una crisis hospitalaria por la escalada sin precedentes de contagios de SARS-CoV-2, que mantiene en 0% la capacidad de las unidades de cuidados intensivos.
Los Ángeles registra 677 mil 299 casos positivos en total, mientras el estado de California sobrepasó este jueves los 2 millones de casos.
Ante la escalada, la jefa de control y prevención de enfermedades de transmisión del condado de Los Ángeles, Sharon Balter, pidió a los proveedores de salud que hablaran con los pacientes con problemas médicos en curso sobre cuándo era apropiado visitar la sala de emergencias o llamar al 911, y que lo hicieran solo cuando se tratara de una verdadera emergencia.
También alentó a dar de alta a pacientes hospitalizados que puedan ser tratados en casa para crear el mayor espacio posible en las salas. Desde la víspera de Navidad las autoridades de salud alentaron a los residentes a evitar las celebraciones de Navidad con personas con las que no compartan hogar y evitar los servicios religiosos al interior de las iglesias.