ARGENTINA.- Miles
de personas perdieron sus empleos durante la pandemia y pasaron por una crisis
económica de la cual solo algunos han logrado recuperarse, situación que
ha sido aprovechada por estafadores y secuestradores, pues recientemente una
joven fue drogada y violada durante una entrevista de trabajo y lo
denunció a las autoridades.
Este terrible hecho
se registró en Balvanera, Buenos Aires y al parecer, la mujer de 18
años de edad contactó a su agresor a través de redes sociales, sin
imaginar lo que sufriría.
Medios locales
informaron que el “empleador” citó a la joven en un local comercial para
brindarle mayor información sobre el puesto de trabajo, pero un día antes la
había invitado a cenar, lo cual fue rechazado por la joven y decidieron
reunirse el pasado 23 de enero.
Ese día, luego de
la entrevista, la joven comenzó a trabajar en el lugar dedicado a
la venta de equipo médico y aseguró que en varias ocasiones el hombre
le ofreció un vaso con jugo o refresco, pero ella no lo aceptada; finalmente
por la insistencia del joven, la víctima lo aceptó pero inmediatamente después
de ingerirlo comenzó a tener mareos.
“Creo que el dueño
de donde trabajo me drogó, porque me siento mareada”, escribió la víctima
por WhatsApp a su hermana y envió también su ubicación.
Afortunadamente la
joven pudo dar aviso a su familia de lo que estaba pasando, por lo que de
inmediato solicitaron ayuda a la policía y lograron arrestar al
sujeto. Cuando encontraron a la joven presentaba signos de abuso sexual y
efectos psicotrópicos, por lo que fue trasladada al Hospital Ramos Mejía y una
médica confirmó el posible abuso sexual.
Conceden libertad
al agresor
Lo que causó
indignación durante este caso, es que el Juzgado Criminal y Correccional 15 a
cargo de la jueza Karina Zucconi, calificó el delito como “abuso sexual simple”
y dejó en libertad al responsable, por lo que se desataron protestas y la jueza
optó por cambió el delito a abuso sexual agravado con acceso carnal.
Ahora, el sujeto
enfrentará el proceso en libertad bajo la “la prohibición de tomar
contacto por todos los medios de la víctima” y la “prohibición de
salir del país”.