Un jaguar de ocho años de edad llamado “Máscara”, que era
importante para la conservación de la especie, fue lanzado desde un puente a un
río terminando así con su vida.
El felino era uno de los últimos 20 que quedaban en Sao
Paulo, Brasil, y su masacre ha causado conmoción pues se asume que fue cometida
con saña.
La autopsia reveló que tenía al menos 50 perdigones en su
cuerpo y se cree que lo mataron en una zona rural, para después lanzarlo al
río.
Expertos comentan que si la caza de estos animales aumenta
al 10%, en menos de 100 años ya no quedará ninguno en esa región, lo cual
podría afectar y desequilibrar la fauna y la flora.
La policía del lugar se encuentra en las investigaciones
para dar con el culpable, la condena puede ser de seis meses, hasta un año.