Dragon Ball Super, serie escrita por Akira Toriyama e
ilustrada por Toyotaro que comenzó a transmitirse en 2015 y finalizó en 2018,
es blanco de una gran polémica en Argentina, pues el Ministerio de las Mujeres,
Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires
denunció un capítulo por violencia simbólica.
El episodio, que salió a través de Cartoon Network
Latinoamérica, reproducía el ejercicio de violencia sexual por parte de un
mayor hacia una menor, en un contexto de aceptación social, en el que se
naturalizaba la vulneración de una niña, según la institución.
"Estas representaciones, transmitidas en la pantalla de
un canal que se ubica como la 1era señal infantil de cable y alcanza a las y
los niños de entre 4 a 11 años con cable (según datos IBOPE Media Argentina),
configura un acontecimiento que las y los expone a la violencia
simbólica", señala el Ministerio.
En la transmisión a la que se hizo referencia, el personaje
del Maestro Roshi, le pide a uno de sus alumnos que le permita utilizar los
“servicios” de una de sus mascotas mágicas, la cual puede transformarse
físicamente. Allí le aclara que lo que quiere es “que se convierta en una
hermosa jovencita”. Y se justifica diciendo “mi punto débil son mis
pensamientos pervertidos que deseo superar”.
"El episodio en cuestión escenifica una multiplicidad
de detalles morbosos: la adolescente encerrada con el adulto Maestro Roshi
diciendo que no reiteradas veces y tratando de escapar –dando claras muestras
de que no hay consentimiento-; el Maestro, en su lugar de poder, diciendo que
no puede detenerse, que es más fuerte que él; mientras que los demás personajes
miran desde afuera no interviniendo en la situación", indica el
comunicado.
El informe detalla que “la escena retrata cómo la negativa
de la joven resulta desoída por el maestro, quien continúa forzando el encuentro,
al tiempo que los demás personajes, visiblemente conmovidos y angustiados por
la situación, observan en silencio el accionar violento y abusivo del varón
adulto”.
Destaca que tanto desde Cartoon Network como desde
Warnermedia se mostraron receptivos en relación a los señalamientos de las
audiencias y manifestaron gran preocupación por la emisión del capítulo,
reconocieron el error en la secuencia de programación ocurrido dentro de los
procesos habituales que realiza la señal para evaluar la pertinencia y calidad
de los contenidos a emitir.
"Al mismo tiempo, informaron sobre las medidas tomadas
a partir de este hecho, entre las cuales señalaron la decisión de sacar la tira
completa del aire. A su vez manifestaron que se procederá a editar no sólo el
capítulo objetado sino la totalidad de la serie, por si en un futuro se
decidiera volver a ponerla al aire".