AL MENOS 21 empleados de la Organización Mundial de la Salud
(OMS) han sido señalados de haber cometido explotación y abusos sexuales contra
niñas y mujeres durante la respuesta al ébola en la República Democrática del
Congo, según una investigación interna.
Tras un año de investigación, la comisión ha identificado a
docenas de posibles víctimas y a 21 presuntos autores. En total, el equipo
recibió el testimonio de 63 mujeres y 12 hombres, con edades comprendidas entre
los 13 y los 43 años y con una media de edad de unos 20 años.
A las víctimas se les prometía trabajo a cambio de
relaciones sexuales. Nueve mujeres han denunciado que fueron
violadas, veintinueve más denunciaron que quedaron embarazadas.
Seis víctimas de violaciones afirmaron haber sufrido abortos
espontáneos. Otras contaron a los investigadores que los hombres que abusaron
de ellas también las obligaron a abortar ofreciéndoles los medicamentos e
incluso inyecciones.
Tras conocerse los resultados de la investigación, el
director general de la Organización, el doctor Tedros Adhanom Gebreyesus, pidió
perdón a las víctimas y dijo que asumía “la responsabilidad última” por los
fallos que permitieron este comportamiento.
“Lo siento. Lamento lo que les han hecho personas
contratadas por la OMS para servirles y protegerles”, dijo el director de la
agencia.
Las víctimas solo pudieron proporcionar los nombres de pila
de otros presuntos autores, a los que aún no se ha identificado. En esos casos,
la OMS está contratando a un servicio de investigación externo.
La Organización prohibirá a los autores identificados
trabajar en el futuro y lo notificará a todo el sistema de las Naciones Unidas.
También remitirá las denuncias de violación a las autoridades de la República
Democrática del Congo para que las investiguen, y al país de nacionalidad de
los presuntos autores, si procede.
La OMS desempeñó un papel central en la respuesta
internacional al décimo brote de la enfermedad por el virus del Ébola en el
este de la República Democrática del Congo (RDC) entre agosto de 2018 y junio
de 2020. Durante este período, 3,481 personas se infectaron con el fiebre
hemorrágica conocida como Ébola y 2,299 personas murieron.
Este brote de ébola en las provincias de Kivu del Norte e
Ituri, el segundo mayor brote de ébola registrado, se declaró terminado el 25
de junio de 2020.
En respuesta a los informes de prensa sobre presuntos abusos
y explotación sexuales por parte del personal de la OMS en respuesta al décimo
brote de ébola1, el director general de la OMS, Tedros Ghebreyesus, anunció el
establecimiento de una Comisión de Investigación Independiente para investigar
las denuncias de explotación y abusos sexuales.
Entre las recomendaciones hechas se detalla conformar un
grupo de trabajo dentro de la organización para reflexionar sobre las
modalidades de apoyo y asistencia psicológica a las presuntas víctimas desde
las primeras denuncias de hechos hasta la conclusión de las averiguaciones
previas.
También encomendar a este grupo de trabajo hacer propuestas
sobre las posibilidades de otorgar reparaciones a las víctimas, así como a
hacer valer todos los derechos de los de sus niños que nacieron producto de
esos abusos sexuales, señala el informe