(apro).- Por segunda vez en los últimos días el presidente Andrés Manuel López Obrador hizo referencia a su retiro cuando termine su administración en septiembre del 2024. Insistió en que no buscará la reelección.
Aseguró que no volverá a participar en actividades políticas ni en conferencias, homenajes o actos públicos y ni siquiera se manifestaría “en casos lamentables de ningún tipo”.
“Voy a apagar el teléfono, hasta mis hijos, mis nietos van a ser siempre aceptados, bien recibidos, pero cero política, cero política, porque ya tenemos que darle la estafeta a los que vienen detrás”, dijo.
Refirió que a su retiro será uno de los presidentes de mayor edad. “El que está chocheando pues el que les habla porque de todos los presidentes soy el de más edad”.
En su conferencia se refirió nuevamente a lo que hará en el futuro, cuando concluya su mandato.
“Hasta septiembre, soy maderista, creo en la democracia, creo en el sufragio efectivo y la no reelección, son mis principios y nadie debe de sentirse insustituible, no caer en el necesariato (...) creo incluso fraternamente que los errores que han cometido algunos gobernantes de izquierda en América Latina han consistido en querer mantenerse en la reelección. ¡No, ya terminamos y a otra cosa!
“Sí me voy a dedicar a investigar y a hacer un libro, ya lo he dicho, sobre el pensamiento conservador, que es un tema importantísimo que me interesa mucho y creo que es un aporte para las nuevas generaciones y a eso me voy a dedicar.
“¿Y de qué voy a vivir? Bueno, ya tengo o voy a tener derecho a mi pensión en el ISSSTE. Ya de una vez también lo digo, hay un tope en las pensiones del ISSSTE, pero con eso. Y Beatriz (Gutiérrez Müller) tiene su trabajo, es investigadora y los ahorros y con eso vamos a vivir. Además no estoy acostumbrado a un tren de vida de lujo, me da pena”, declaró López Obrador.
Se pronunció por una vida austera, viviendo con lo “básico” e “indispensable” y mostró su respeto para quien tiene un patrimonio mediante el trabajo.
“Siempre lo he dicho, no todo el que tiene es malvado”, refirió. “En mi filosofía nunca me ha interesado el dinero”, indicó.
Recordó que cuando estaba casado con Rocío Beltrán tenía dos trabajos en Tabasco y fue a pedir un aumento de sueldo mientras su esposa fallecida se hizo cargo de tener una casa.
“En mi filosofía nunca me ha interesado el dinero, nunca. Yo tuve una casa en Tabasco, por mi esposa, por Rocío, mi finada esposa, porque yo estaba trabajando —se los cuento— y tenía yo dos trabajos, era yo director del INI y además era yo de Desarrollo Social del gobierno del ingeniero Rovirosa, y me pagaban en el INI, pero no me pagaban en el otro trabajo.
“Y entonces fui una vez a ver al ingeniero Rovirosa y le dije que quería que me diera algo ¿no?, un aumento de sueldo y como eran las cosas antes le puso al secretario de Finanzas que me dieran en aquel entonces cinco mil pesos mensuales y llevé la tarjeta firmada —González Marín era el secretario de Finanzas— y se la di a Rocío.
“Pasó el tiempo, yo no cobré, pero de ahí se compró un terreno para la casa y ella se hizo cargo, ella contrató a los maestros albañiles y ya cuando me di cuenta ya teníamos una casa, por ella”, relató.
“Somos muy felices, somos muy felices y gracias a la vida, gracias al pueblo, no voy a fallarle al pueblo y estos años que faltan me voy a aplicar a fondo también para que no me quede ningún remordimiento de que no me comprometí al 100. Por eso, de aquí a septiembre (de 2024) a fondo, a trabajar”, concluyó.