Pue. (apro).- Por una intervención fallida, la policromía estofada original de una imagen de San Francisco de Asís, patrono de la ciudad de Tepeaca, que data del Siglo XVI, quedó destruida, por lo cual un grupo de ciudadanos presentó una denuncia formal ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
La Comisión Ciudadana para el Cuidado y Rescate del Patrimonio Cultural Tepeaquense informó que la destrucción de los acabados estéticos de la pieza de arte religioso quedó al descubierto el 4 de julio, cuando por redes sociales un artesano divulgó fotografías en las que se podía ver que, en vez de restaurar su acabado policromado con más de 400 años de antigüedad, el encargado lo retiró completamente.
Los integrantes de esta Comisión presentaron entonces una denuncia ante el INAH, por lo cual el 14 de julio, representantes del instituto, encabezados por el delegado Manuel Villarruel, acudieron para colocar sellos de clausura en el espacio donde se encontraba la imagen para iniciar una investigación.
Hasta ahora, lo que han denunciado los pobladores es que fue el sacerdote Fernando Sedano López, titular de la Parroquia de San Francisco de Asís –templo que forma parte del convento franciscano de Tepeaca– quien encargó el trabajo de restauración de la imagen a un artesano que no contaba con los conocimientos técnicos para llevar a cabo el trabajo, ni tampoco conocía los lineamientos del INAH en materia de conservación.
La Comisión Ciudadana detalló en escritos entregados el 10 de agosto al gobernador Salomón Céspedes Peregrina, a la Secretaría de Cultura del Estado y al Arzobispado de Puebla que esta intervención se llevó a cabo sin contar con el permiso y supervisión del INAH.
Incluso en redes sociales se ha precisado que los trabajos de supuesta restauración tuvieron un costo de 150 mil pesos por lo que la iglesia pidió donativos a los feligreses para cubrir el gasto. También se presume que la imagen religiosa fue sacada del templo y del convento, pues las fotografías que se divulgaron en Facebook el 4 de julio corresponden a otro lugar, aparentemente un taller, aunque después de la denuncia al INAH el patrono volvió a ser colocado en el conjunto franciscano.
La imagen afectada es una escultura tallada en madera de San Francisco de Asís de pie, que mide 1.70 metros de altura y 55 centímetros de ancho, y corresponde a la parroquia de Tepeaca, ciudad que el 4 de septiembre de 2020 celebró 500 años de su fundación.
Los integrantes de la Comisión Ciudadana señalaron que la escultura estaba ataviada con un hábito “decorado al estofado, es decir, con aplicación de pan de oro en el fondo y encima pintura al temple formando grandes flores de color rojo muy vistosas con algunas hojas, lo cual da al conjunto gran belleza y excepcional elegancia debida al movimiento de los pliegues”.
Esta Comisión también entregó el 8 de agosto un escrito al INAH en el que pide informar sobre el procedimiento, iniciado a través del departamento de Trámites y Servicios Legales, derivado de la “desastrosa intervención” a la que fue sometida la escultura patronal en la cual se le retiró todo el policromado.
“Nuestra preocupación busca satisfacer la preocupación generalizada de la población acerca de la aplicación de la Ley, en cuanto a fincar responsabilidades y aplicar las sanciones correspondientes, con acento especial en que la presente situación no se vuelva a repetir en los numerosos Bienes Muebles e Inmuebles que conforman el Patrimonio Cultural de Tepeaca y de la Nación”, reclaman en un escrito firmado por los integrantes de la Comisión y habitantes del municipio.
